Neymar ya está de vacaciones. La Bélgica de Courtois y Hazard, dos futuribles del Real Madrid, se empeñó en mandar a casa al futbolista del PSG que, pese a intentarlo todo, no estuvo acertado e incluso se encontró con las manoplas del meta belga. Una parada del arquero del Chelsea le despertó del sueño mundialista y lo apeó del torneo. La prórroga se esfumaba entre sus dedos y el pitido del árbitro dibujó un gesto triste en la cara del '10' de la Canarinha. 

Pero no es tan mala noticia como auguraba la triste eliminación de Brasil. El actual futbolista del Paris Saint-Germain se enfrenta ahora a su futuro. Un dilema en el que tendrá que decidir lo más temprano posible, sobre todo para que los equipos interesados se muevan rápido en caso de respuesta negativo. El conjunto blanco, tal y como adelantó EL BERNABÉU, no se rendiría por Neymar. El Real Madrid luchará hasta el final para hacerse con sus servicios este mismo año, y más ahora cuando la salida de Cristiano Ronaldo se antoja inminente. De hecho, la entidad de Concha Espina está dispuesta a llegar hasta los 300 millones de euros.

LA 'OPERACIÓN NEYMAR'

Los merengues llevaban tiempo estudiando la posibilidad de incorporar al jugador brasileño a sus filas, sobre todo desde su salida del Barcelona el pasado verano. Este año está más cerca que nunca. Algunas leyendas del fútbol de Brasil aconsejan incesamente que si quiere triunfar en el mundo del balompié no se puede quedar en la capital francesa, sino que tiene que volar a Madrid. 

El Real Madrid es el único equipo posible en el que poder gobernar y destronar, primero, a Cristiano Ronaldo y Leo Messi. Los dos futbolistas han hecho del Balón de Oro un coto privado de caza en el que nadie tiene permiso para entrar y, por supuesto, Neymar tampoco lo tiene. Por ello, sus aspiraciones de ser el mejor del mundo pasan por el Santiago Bernabéu. Además, podrá erigirse como el líder del equipo si se produce la salida del astro portugués a la Juventus de Turín. 

LA CUENTA ATRÁS

Con su eliminación, el reloj está en marcha para que decida. El jugador ya aseguró, según UOL, que tomaría una decisión en cuanto se terminara el Mundial. Para su desgracia, este final ha llegado quizás pronto, por lo que aún tendrá que sopesar cuál será su elección. O bien quedarse en el PSG y liderar a un equipo al que le cuesta dar el do de pecho en Europa. O bien hacer las maletas y ocupar la vacante que presumiblemente dejará Cristiano Ronaldo en el Real Madrid y continuar con la dictadura merengue. 

Entre tanto, en el Real Madrid esperan su decisión y, por ello, ha comenzado la cuenta atrás para ver a Neymar vestido de blanco inmaculado. Una operación que se seguirá abordando durante los próximos días y en la que el Madrid irá con todo para poder hacerse los servicios del que consideran futuro Balón de Oro.