La eliminatoria ante la Juventus contó con un peculiar y peligroso antecedente. El Real Madrid, que acudía con una renta a priori holgada al partido de vuelta de los cuartos de final de la Champions, sucumbía a las primeras de cambio ante la agresividad ofensiva de los italianos. A la media hora ya ganaban los bianconeri por dos goles a cero e instauraban las dudas en la grada del Santiago Bernabéu.

Sobre todo a tenor de lo ocurrido en el día anterior en Roma, donde el club giallorossi dio la sorpresa de la edición al tumbar a un impasible e irreconocible Barcelona. Los de Valverde no supieron hacer buena la renta de tres goles que lograron en su feudo, mientras que la Roma hizo oro del gol cosechado en el Camp Nou.

El partido malo de cada Champions

EL REAL COQUETEA CON EL DESASTRE

No obstante, el mismo guión parecía estar plagiando el Madrid en su casa. Durante el descanso fueron varios los futbolistas merengues que recordaron a sus compañeros la vergonzante eliminación previa del Barcelona, a fin de no correr por los mismos derroteros.

Tras el descanso, una monumental cantada de Keylor Navas puso en bandeja la igualada de la eliminatoria para el equipo transalpino. Al Madrid le empezaron a temblar las piernas, pues un gol más de los italianos les obligaba a hacer ahora dos tantos para superar la contienda. Sin embargo, los de Zidane volvieron a sacar  el orgullo característico madridista para convertir un clamoroso penalti de Benatia a Lucas en el bendito minuto 93. Cristiano hacía el único gol que permitía al Madrid noquear a una aguerrida Juventus y acceder a las semifinales.

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LOS ANTECEDENTES

Lo que está bastante claro es que, para la hinchada merengue, el partido ante la Juve retrotrajo a la retina numerosos enfrentamientos previos en la Champions League ante equipos que a punto estuvieron de firmar la machada de su historia ante el club blanco.

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AÑO 2017: BAYERN MÚNICH

El año pasado los pupilos de Zidane se enfrentaban a un siempre correoso Bayern Múnich. El partido de ida correspondía su disputa en el Allianz Arena, por lo que era de obligado deber el dejar medio atada la eliminatoria allí. nada más lejos de la realidad, el resultado final fue empate a uno, y todo abierto para su resolución en el Santiago Bernabéu.

El guión parecía un calco al que se dio ante la Juve esta temporada. El Bayern salió, sin temeridad y con valentía, a por el partido desde el primer minuto. Es más, logró adelantarse en el marcador e incluso llegar a llevar la eliminatoria a la prórroga. Zidane, que daba sus primeros visos de desconfianza hacia Bale, dio la alternativa a Marco Asensio según mediaba la segunda parte. Un gol del mayorquín unido a un hat-trick de Cristiano certificó el pase a semifinales. Valió La Decimosegunda.

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AÑO 2016: WOLFSBURGO

Hace dos temporadas, fue el Wolfsburgo el que a punto estuvo de apear a los blancos de la competición, sorprendiendo a los de Zidane en Alemania por un 2-0 final. El conjunto blanco se vio obligado a tirar de la épica en el templo madridista para procurar el pase a la siguiente fase. 

El nerviosismo se palpaba pero el Real Madrid salió sólido atrás y mentalizado en darle la vuelta a la eliminatoria. Una situación muy parecida en La Liga a la de este año obligaba a los blancos a apostar todo a la competición fetiche del Madrid. El asedio de los chicos de Zidane era constante, y tras una brillante actuación de Carvajal, Cristiano abrió la lata y allanó el camino. En la segunda mitad, el portugués se encargaría de reventar la eliminatoria y certificar el pase. Valió La Decimoprimera.

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AÑO 2014: BORUSSIA DORTMUND

Esta vez el guión fue distinto. El encuentro de ida correspondiente a los cuartos de final tuvo lugar en el Santiago Bernabéu. Razón sine qua non para que el Real dejara si no finiquitada, en vías muy probables de ello, la eliminatoria para no sufrir en Alemania.

Y así fue. Con Carlo Ancelotti en el banquillo, el Real Madrid rebosó en todos los aspectos a un Borussia incapaz de lograr inquietar el arco madridista defendido, por aquel entonces, por Iker Casillas. Cristiano Ronaldo, Bale e Isco se encargaban de resolver el partido. Sin embargo, la presión bestial del Signal Iduna Park provocó que el partido de vuelta se convirtiera en un auténtico infierno. Di María falló un penalti y, pese a adelantarse el Dortmund en el marcador, estos se mantenían cautos esperando el fallo madridista. Finalmente el conjunto merengue sucumbió por cero goles a dos, gracias a dos brillantes intervenciones de Casillas. Valió La Décima.

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