En reiteradas ocasiones, Andrés Iniesta ha reiterado que el día en el que no sea un jugador importante para el F.C. Barcelona cogerá la puerta de salida. Con los fichajes de Dembelé y, especialmente, Coutinho, el papel protagonista que ha tenido el manchego hasta la fecha en la entidad azulgrana podría resentirse y relegar al centrocampista español al banquillo o la grada supondría un problema mayor en Can Barça. Con temor a las posibles preguntas sobre su futuro que podrían surgir, el conjunto culé ha optado por vetar todo tipo de cuestiones relacionadas con el futuro del capitán barcelonista.

SUSANA GUASCH, TESTIGO DEL VETO

"Teníamos muchas ganas pero desde esta posición ya nos han avisado que solo preguntas del partido".

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