Era la ida de los octavos de final de Champions pero por el ambiente previo que se respiró en el Santiago Bernabéu parecía la vuelta de unas semifinales. Esa atmósfera de las grandes noches europeas recubrió la capital de España desde bien temprano, tal y como se demostró con el recibimiento al autobús del Real Madrid por parte de su afición. Las sorpresas se las guardaron Zidane y Emery para las alineaciones. El galo alineó a Isco en lugar de Bale y el técnico del PSG a Kimpembe, Yuri y Lo Celso. Era mucho más que un partido y eso lo sabían ambos clubes. El reto de un nuevo rico ante la tradición para poner en jaque el mapa futbolístico. (Así vivimos el partido en directo)

El Real Madrid cumplió con lo prometido y salió enchufado, presionando e intentando ahogar al PSG. La misión era atacar la mentalidad del conjunto galo. Kroos y Cristiano Ronaldo dieron los primeros avisos, pero Neymar, cuando no estaba revolviéndose por el césped, respondió. Además, el brasileño sería el primer jugador en ver una cartulina amarilla por una dura entrada a Nacho. Había buen fútbol, tensión y morbo. Es decir todo lo que se le puede pedir a un encuentro de la máxima competición continental. 

Marcelo y Marco Verratti

INTERCAMBIO DE GOLPES SIN TREGUA

El duelo lo personificaban Cristiano y Neymar. Ambos eran los futbolistas que creaban más peligro en el área contraria. El portugués tuvo un mano a mano con Areola, después de un gran pase que Marcelo, que el guardameta logró sacar con la cara. La parroquia madridista, que ya cantaba el gol, sufriría un jarro de agua fría poco después. En el minuto 33 aparece por primera vez Mbappé y se la lía a Marcelo. Su centro lo toca sutilmente Neymar y deja un remate franco a Rabiot que no falla. El PSG golpeaba primero. 

No tardaría en reaccionar el Madrid, aunque más clara aún fue la ocasión de Cavani para dar casi un golpe mortal a la eliminatoria. El uruguayo, con todo a favor dentro del área, se encontró con Casemiro tras controlar y darse la vuelta. Se salvó el equipo de Zidane y justo al filo del descanso encontraría el premio del empate. Una torpeza de Lo Celso, empujando a Kroos en un córner sacado rápido, fue castigado por Rocchi con un penalti tan justo como ridículo aunque el colegiado italiano perdonó la segunda amarilla al centrocampista argentino. Y ahí, en esa delgada línea entre la vida y la muerte, Cristiano nunca falla. El portugués batió a Areola y devolvió la igualdad después de 45 minutos frenéticos. 

Cristiano Ronaldo, con el balón en el partido contra el PSG

El frenesí de San Valentín se mantendría también durante la segunda mitad. Un partido de ida y vuelta en el que cualquiera podía tumbar al adversario en el continuo intercambio de golpes. Keylor Navas salvó ante Mbappé la primera clara del PSG. El tico realizaba su primera parada de mérito, mientras sus compañeros seguían buscando a un Isco que estaba bailando con el balón. El malagueño estuvo incisivo con la presión y preciso en el pase. Una clase magistral que refrendaba los motivos por el que ocupó un lugar en el once. El debate no debía ser con Bale y sí el de un Benzema que, a pesar de estar mejor que las últimas semanas, no le salía nada. 

ZIDANE GANA LA PARTIDA A EMERY

Pasada la hora de juego llegó el momento en el que los entrenadores debían mover ficha. Emery pasó al 4-4-2 con la entrada de Meunier y adelantó la posición de Dani Alves. El típico ataque de miedo del español que veía el 1-1 como un buen resultado para la vuelta. Por su parte, Zidane metió a Bale por Benzema. Sonaban las cornetas en el Santiago Bernabéu. Llegaba la fase clave sobre el césped para el desenlace del primer acto. Antes de estos ajustes Rocchi perdonó una nueva expulsión al PSG. Esta vez a Neymar al simular una falta de Casemiro en el centro del campo. El crack brasileño es muy bueno, pero también muy piscinero. Una cualidad que no gusta a la afición merengue y que deberá cambiar si algún día quiere fichar por el equipo que esta noche era su rival. 

Los centrocampistas del Madrid se iban quedando poco a poco sin gasolina y eso se reflejaba en un mayor dominio del PSG. Yuri, con un cretochut, estuvo a punto de encontrar a Mbappé en el segundo palo. Los blancos necesitaban aire fresco y Zidane agotó sus balas con un doble cambio. Lucas Vázquez y Asensio por Casemiro e Isco. Era el todo por el todo en busca de un segundo gol que facilitara visita al Parque de los Príncipes. 

UN SAN VALENTÍN CRISTIANO

Los cambios de Zidane surgieron efecto y Asensio y Bale empezaron a meter electricidad en el juego merengue. El PSG sesteaba y eso lo aprovechó el balear para ganar la línea de fondo y meter el balón en el área. Areola se quitó como pudo la pelota y esta acabó rebotando en la rodilla izquierda de Cristiano para besar la red. El romanticismo evolucionó en un orgasmo futbolístico en el Santiago Bernabéu. Otra vez el de siempre. Otra vez el ganador de cinco Balones de Oro. Otra vez el Rey.

Pero lo mejor no había llegado todavía, ya que solo tres minutos después Marcelo haría el definitivo 3-1 que da una ventaja más que atractiva a los blancos para la vuelta. De nuevo tras un centro de Asensio al área. El delirio y la emoción se instauraba para quedarse en el coliseo merengue. Nunca hay que dar por muerto a este equipo. Con La Liga perdida y eliminado de la Copa, pero la Champions es el Real Madrid. La primera gran noche de la temporada. El primer sobresaliente. Zidane y sus chicos quieren la tercera 'Orejona' consecutiva. 

REAL MADRID 3-1 PSG

Real Madrid: Keylor Navas; Nacho, Varane, Sergio Ramos, Marcelo; Modric, Casemiro (Marco Asensio, 79'), Kroos; Isco (Lucas Vázquez, 79'); Benzema (Bale, 68'), Cristiano.

PSG: Areola; Dani Alves, Marquinhos, Kimpembe, Yuri; Verratti, Lo Celso (Draxler, 84'), Rabiot; Mbappé, Cavani (Meunier, 65'), Neymar.

Goles: 0-1, 33' Rabiot; 1-1, 45' Cristiano (p); 2-1, 83' Cristiano; 3-1, 86' Marcelo.

Árbitro: Gianluca Rocchi (Comité italiano). Amonestó a Neymar (14'), Lo Celso (25'), Isco (32'), Rabiot (64'), Nacho (78') y Meunier (90')

Incidencias: Partido correspondiente a los octavos de la Champions League disputado en el Santiago Bernabéu (Madrid).