La historia de James Rodríguez como jugador del Real Madrid es casi el argumente de una telenovela colombiana. Con un inicio por todo lo alto y donde todos era felices y que poco a poco fue en decadencia. Tensión, tristeza e incluso salidas de tono para llegar hasta el final del culebrón que todo el mundo espera su salida del club blanco. La serie bien podría llamarse: La decadencia de James y cuenta con cuatro argumentos principales.

SU BAJA FORMA EN EL VERANO DE 2015

Tras una primera temporada a un nivel que rozaba lo sobresaliente, James llegó a la pretemporada de 2015 un tanto pasado de peso. Su bajo estado de forma le dejó un escalón por debajo de sus compañeros costándole alcanzar su ritmo en una fase tan importante de la temporada. Fue el primer punto negativo en su relación con el entonces nuevo entrenador del Real Madrid, Rafa Benítez que a posteriori le sentaría en el banquillo.

SU RELACIÓN CON BENÍTEZ Y ZIDANE

Como ya se refleja en el punto anterior, su relación con Benítez comenzó de la peor manera por el bajo estado de forma del colombiano. No mejoraría en el resto de andadura del técnico español en el banquillo blanco. La entrada de Casemiro en el esquema le terminaría por enterrar en el ostracismo de la suplencia.

Con la llegada de Zidane la ilusión se impregnaría en el jugador cafetero, sin embargo, se chocó de frente con la realidad y siguió siendo suplente habitual e incluso uno de los descartes en más de una ocasión. El técnico siguió apostando por el centrocampista brasileño y prefería apostar por otros futbolistas como Isco, Lucas o Asensio -en la presente temporada- antes que James. Irrelevante, el día clave fue la final de Cardiff de la cual no formó parte ni de la convocatoria.

SUS SALIDAS DE TONO EN COLOMBIA

Flaco favor el que se hacía James cada vez que acudía con la selección colombiana. Allí el futbolista se sentía importante y sacaba pecho de ello cada vez que le ponían un micrófono delante. Su "aquí juego hasta cojo" dio la vuelta al mundo y solo hizo nada más que empeorar su relación con sus entrenadores. Sus pullitas constantes jugarían en su contra. En su país todos apoyaban a su compatriota y comenzaron una guerra en contra de Zidane, al cual terminarían dando la razón.

DESESTABILIDAD EN SU VIDA PERSONAL

Cuando todo va mal, cualquier cosa se te pone en contra. Y así le sucedió a James. Apartado del Madrid, su vida personal también se volvió una pesadilla. Se conoció a través de la prensa sensacionalista que el jugador y su pareja, Daniela Ospina, pasaron por una crisis a comienzos del 2016. Se vio un James alicaído al cual le afectó más de la cuenta su delicada situación matrimonial. Tras varios meses, la pareja salió hasta reforzada de aquella situación pero el daño en la carrera de James ya estaba hecho.

James se luce en el entrenamiento con una chilena by footbie.com