El Real Madrid se enfrenta a la semana más dura y exigente de la temporada. Tres partidos en apenas siete días que resolverán La Liga y pueden marcar el futuro del equipo blanco en Europa. Conquistar el campeonato español superando a un Barcelona que solo tendría como consuelo la Copa del Rey daría un plus más de ilusión y moral de cara a la final de la Champions League en Cardiff donde ya espera la Juventus.

Por ello, Zidane no quiere asumir riesgos, sabe de la importancia de los próximos nueve días y por ello no quiere dejar cabos sueltos. La segunda unidad que ha deslumbrado a medio mundo seguirá teniendo la oportunidad de hacer todavía más grande al Real Madrid y aportar su granito de arena para la consecución del título. Sin embargo, el entrenador francés quiere fusionar a esta segunda unidad con el equipo A para crear una primera unidad donde todos los jugadores de su plantilla rindan al cien por cien. El técnico blanco apostará por los titulares al igual que ha hecho en los partidos clave de la temporada, pero dará entrada a los menos habituales para continuar con una puesta a punto perfecta de la plantilla.

Sevilla, Celta de Vigo y Málaga son los tres choques que tiene el conjunto madridista por delante para poder alzarse con el título de Liga, con la posibilidad de pinchar en uno de ellos siempre que no sea una derrota. Pese a ello, Zidane no quiere sustos y espera resolver una semana muy complicada con trabajo y sacrificio. Jugadores como Lucas Vázquez, Marco Asensio, Kovacic, James Rodríguez o Álvaro Morata tendrán minutos al igual que ha ocurrido en las últimas jornadas, pero de una forma distinta, ya que formarán parte del equipo A creando una primera unidad que pueda afrontar al cien por cien los días decisivos de la temporada.

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