El Real Madrid lo volvió a hacer. Consiguió dar la vuelta a la historia y hacer que el infierno fueran los de Zidane para San Paolo, lo que significa un paso más hacia Cardiff. Tras vencer al Nápoles en su casa, el conjunto merengue encadena ya siete temporadas llegando los cuartos de final. Fue en 2010 donde el Madrid tuvo la última ocasión en la que los blancos no estuvieron entre los ocho mejores de Europa.  

Desde entonces, el balance en octavos de final es de 10 victorias, 3 empates y 1 sola derrota, con 36 goles marcados y 13 recibidos. Fuera del Santiago Bernabéu en este periodo fueron 5 triunfos y 2 empates. La buena racha comenzó seis años atrás, en 2011, cuando los madridistas superaron al Olympique de Lyon. Luego, llegaron las eliminatorias contra CSKA de Moscú en 2012 y ante el Manchester United un año después con victoria incluida.

Durante el 2014 y el 2015, los blancos tuvieron exactamente el mismo rival en octavos, el Schalke 04. De los cuatros enfrentamientos contra el equipo alemán se recuerda la grandiosa actuación de la BBC con el 1-6, que marcaría el camino de la Décima.

En estas dos últimas campañas, los blancos han superado a un rival italiano en esta ronda: Roma y Nápoles. Si los de Zidane llegaran a semifinales supondrá un récord en la competición al llegar sitete veces consecutivas. Datos que hablan por sí solos en un Madrid que es imparable y que ha marcado su territorio en la Champions League donde es el actual campeón de Europa.