El Real Madrid se impuso al Zalgiris Kaunas con una buena segunda mitad. El equipo merengue tiró de Rudy Fernández y Sergio Llull para encarrilar el triunfo desde el perímetro. El efecto Dragic se secó y el conjunto merengue continúa en buena forma con un 7-2 de balance. [Narración y estadísticas: Real Madrid 95-82 Zalgiris]

El combinado capitalino tenía ante sí un partido trampa. Pese al último puesto que luce Zalgiris en la tabla europea, el refuerzo de Dragic y la siemprepeligrosa plantilla lituana obligaban a dar el cien por cien. Y así salió el Real Madrid, que tras apenas unos segundos de partido ya había tirado de Tavares para abrir el luminoso. Zalgiris comenzaba flojo en defensa y los madridistas tomaban la delantera.

Tras un 6-0 de salida, el Zalgiris fue despertando justo en el ecuador del cuarto. Eso y el atasco ofensivo de los de Laso obligaron al técnico a pedir tiempo muerto con un 10-9 impulsado por Dragic desde el triple. La esperada reacción tras ese parón llegó de la mano de los 'nuevos'. Hanga en el triple, Yabusele y Poirer en la pintura, bastaron para cerrar los diez iniciales con 20-11 de marcador.

Zalgiris, lejos de darse por vencido, apostó por el ataque desde el perímetro y gracias a tres aciertos casi consecutivos cambió por completo el duelo. El 24-20 que instauró Webster así lo reflejaba. Fue entonces cuando Rudy dio un respiro a los de Laso con una reacción desde el perímetro. Él, junto a Llull, fueron suficientes en el duelo de veteranos ante Dragic. Las canas del Real Madrid pesaron más y el combinado merengue se fue hasta el 47-34 gracias a Poirier.

A cinco para el descanso, el Real Madrid volvió a atascarse y los lituanos aprovecharon el regalo. Cavanaugh y Lekavicius no perdonaron y Strelnieks, casi sobre la bocina, consiguió echarle el cierre a la primera mitad con un 51-45 que dejaba todo abierto para la resolución del partido.

El colista no es suficiente

La segunda mitad no terminó de consumar el milagro de un Zalgiris que se veía con fuerzas para dar la sorpresa. Y eso que lograron ganar por segunda vez consecutiva el parcial del cuarto, aunque el escaso punto de distancia no sirvió de mucho. El juego se reanudó con Heurtel intentando defender el +10, pero con Zalgiris apostando al triple todas sus opciones.

Los visitantes se pusieron con un esperanzador 65-59 y con dos aciertos seguidos desde el 6,75 se colocaron a solo dos puntos. Llull intervino y el Real Madrid se libró del revolcón con un 75-70 para los diez minutos decisivos. Ahí, los de Laso no tuvieron rival alguno.

Rudy y Llull se repartieron el liderazgo anotador mientras Poirier y Yabusele se pegaban por dentro. Así, de hecho, lo reflejó la valoración de los dos franceses. A cinco para el final, el de Mahón puso el +11 y Zalgiris dijo adiós. Ni los aciertos de Strelnieks valían para meter miedo a un Real Madrid que se aseguró la victoria para evitar sustos finales.

Real Madrid 95-82 Zalgiris Kaunas

Real Madrid: Heurtel (12), Hanga (10), Taylor (-), Yabusele (15) y Tavares (10) -quinteto titular-, Causeur (4), Rudy Fernández (10), Vukcevic (7), Poirier (12), Abalde (2) y Llull (13).

Zalgiris Kaunas: Lekavicius (12), Dragic (6), Strelnieks (7), Giffey (12) y Blazevic (10) -equipo inicial-, Webster (8), Kalnietis (2), Milaknis (6), Lukosiunas (-), Ulanovas (5) y Cavanough (14).

Parciales: 20-11 | 31-34 | 24-25 | 20-12

Árbitros: Robert Lottermoser, Michele Rossi y Sergio Silva. Sin eliminados

Incidencias: Partido de la novena jornada de la primera fase de la Euroliga disputado en el WiZink Center de Madrid ante 6.798 espectadores