Noche de Reyes que deparaba uno de los clásicos más habituales en Euroliga. Maccabi y Real Madrid llegaban muy justos en la tabla y con la constancia de la derrota baskonista ante Fenerbahçe. Había que ganar para no alejarse de los de arriba. Para ello, Laso volvió a confiar en su quinteto con Yusta de titular y Doncic en el banquillo. (Así vivimos el partido en directo).

Y el canterano no defraudó. A pesar de los cuatro triples iniciales de Maccabi y del trabajo incansable de Parakhouski en la pintura, el alero se lució con siete puntos de todos los colores. Penetraciones, reversos y triples para hacer estallar al pabellón con una ovación. Los ánimos los sofocaban los macabeos desde el perímetro y con un lanzamiento de media distancia de Roll, el cuadro visitante lograba un 15-26 a falta de poco más de dos minutos. Tiempo muerto de Laso y cambio totalmente de cara. El parcial de 10-0 merengue fue instantáneo para ajustar el luminoso al 25-26.

La igualdad apenas se movió en el segundo cuarto. La defensa del Real Madrid seguía dando el nivel y no fue hasta que desapareció cuando Maccabi volvió al partido. Tavares, sin estar acertado, intimidaba lo suficiente en la pintura. Yusta seguía en cancha y le tocaba sufrir la falta de calidad arbitral, en gran parte por su poca experiencia en la competición. Doncic, que aparecía por primera vez, empataba con un triple. Ahí el Madrid se empezó a gustar verdaderamente. Aprovechando el rebufo del parcial anterior, Reyes se hizo una carrera para el 33-30. Ahí comenzó el vahído merengue que aprovecharon los israelíes. Jackson y Kane hicieron de las suyas para terminar con un 48-50.

REVOLUCIÓN MERENGUE

Tuvieron que pasar cinco minutos del tercer cuarto para que el juego se rompiese. Hasta el momento, igualdad, falta de intensidad en las defensas y poco más que contar que el protagonismo de Doncic con una canasta y un taponazo. Fueron Campazzo y Thompkins los que rompieron la monotonía. Primero el americano con un triplazo desde la esquina que replicó en dos ocasiones consecutivas el base. Pedía tiempo muerto Maccabi para volver a ver el arrollamiento merengue. Carroll a la contra y Thompkins tras un rebote ponían la máxima en el luminoso con un 67-54. Reaccionó Maccabi que llegó a estar a seis puntos. Pero cuando quisieron recortar demasiado, apareció Tavares con un doble tapón emblemático a Tyus. El 69-60 daba tranquilidad a los de Laso.

EL CUARTO DE LA CABALGATA

Diez minutos para el disfrute. Maccabi no creyó en sus opciones y el Real Madrid comenzó a divertirse. La desesperación en los visitantes era notable y los de Laso la exprimieron. Sobre todo un Rudy Fernández excelso en el perímetro y un Felipe Reyes que hizo honor a la noche batallando cada balón en la zona y poniendo la guinda a cada transición de Campazzo. El argentino repetía acierto desde el triple y, además, destellaba cierta magia que le caracteriza. Algún triple de Zoosman intentaba maquillar el resultado, pero las sensaciones eran claras: superioridad abrumadora del Madrid. Absolutamente todos los madridistas que habían tenido minutos tenían algún punto en su estadística, todo lo contrario que un Maccabi que monopolizó el ataque en Jackson y Parakhouski. Se sumaron a la fiesta Maciulis -sacando a pasear su calidad en la línea de tres- y Tavares -que terminó con un doble doble-. Triunfo de calidad para continuar la racha y demostrar que los Reyes, en Europa, visten de blanco.

REAL MADRID 93-81 MACCABI TEL AVIV

Real Madrid: Campazzo (13), Yusta (7), Causeur (7), Thompkins (10), Tavares (10) -cinco inicial- Carroll (4), Taylor (3), Doncic (11), Maciullis (8), Reyes (14), Rudy (6).

Entrenador: Pablo Laso.

Maccabi Tel Aviv: Roll (4), Bolden (3), Kane (9), Jackson (29), Parakhouski (16)  -cinco inicial- Tyus (9), Dibartolomeo (2), Cohen (0), Segev (-), Zoosman (9).

Entrenador: Neven Spahija.​

Árbitros: Belosevic, Pastusiak, GKontas.

Parciales: 25-26 | 23-24 | 21-10 | 24-21

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 16 de Euroliga que se disputó en el pabellón WiZink Center (Madrid).