El Real Madrid demostró el poco rodamiento que ha tenido la plantilla en conjunto. Jugadas ofensivas sin ningún director ni orden. Defensas insulsas y con fallos absurdos. Pérdidas continuadas y que demostraban la falta de comprensión entre los hombres merengues. Todo ello motivó lo suficiente a un Gran Canaria que se sintió campeón. El público, su buen tratamiento del partido y el acierto en ataque terminó por llevarles a la final de la Supercopa ACB. (Así lo vivimos en directo).

GRAN CANARIA Y SUS TRIPLES

Con un total de 6 triples de los ocho intentos realizados terminó el equipo local el primer cuarto. Poco podía hacer el Real Madrid más que mirar ante tal encadenamiento de aciertos que frenaba cualquier intento de reacción merengue. Ayón y Taylor daban la cara en la ofensiva de los de Laso, pero la falta de movimiento de balón a la hora de crear jugadas fáciles condenaban al Madrid. El 24-17 cerraba un primer cuarto que tampoco castigaba demasiado al cuadro capitalino teniendo el cuenta los fallos cosechados.

THOMPKINS Y CAMPAZZO FRENAN LOS NERVIOS Y LAS PÉRDIDAS

El segundo tiempo siguió sin presenciar la reacción blanca. Kuzmic, Doncic y Causeur se juntaban en pista para intentar dar un cambio al partido, pero se quedó en nada más que una intención. Los nuevos fichajes parecían tener presión a la hora de encarar el aro y tardaron en carburar, mientras que Doncic demostraba no estar al cien por cien. Pese a ello, Kuzmic exhibió sus buenos movimientos cerca de canasta con cuatro puntos y Causeur hizo lo propio desde el triple. Las pérdidas seguían castigando al Real Madrid hasta el punto de alcanzar las 13.  Entre tanto desorden aparecieron Campazzo y Thompkins. El argentino sacó alguna que otra asistencia para aportar al luminoso merengue y el americano recordó su gran pretemporada anotando cuatro puntos desde media distancia. Todo ello para no dejar marchar a Gran Canaria, comandado por Pasecniks y Mekel, más lejos del 37-28. Para poner el último aspecto negativo al cuarto, Reyes se tuvo que retirar tras una dura caída que le afectó a la cadera.

CARROLL CONTRA EL MUNDO

Totalmente insulso el tercer cuarto. El Madrid estaba irreconocible en ataque y tampoco daba mucho la talla en defensa. Pero la pasividad ofensiva de los pío-pío daba una pequeña tregua a los de Laso que, además, jugaban con el tiempo en contra. Terminó el penúltimo round con un aburrido 14-11 y con unas sensaciones más que mejorables en el banquillo blanco del que solo se salvó Carroll gracias a algunas de sus típicas 'bombitas' y a una antideportiva bastante polémica señalada a los canarios.

NI AMÉRICA SALVA AL MADRID

El cuarteto formado por Campazzo, Ayón, Carroll y Thompkins fue de lo poco que se salvó en las críticas al Real Madrid. El último cuarto solo tuvo su presencia con camiseta merengue, al menos en cuanto a aportación se refiere. Los seis puntos de Fischer recibieron la respuesta de Thompkins para apretar el partido. El 'cuatro' aprovechó el buen ritmo imprimido por Carroll y obligó a Casimiro a pedir tiempo muerto para frenar el luminoso en un 59-54. A partir de ahí se desinfló por completo el plantel merengue y Gran Canaria lo celebró. Apenas existía la confianza en los jugadores merengues más allá de los nombrados antes. Mekel volvió a aparecer y puso la puntilla a un Real Madrid que lo intentó en los últimos tramos de partido. Sin triples -6 de 23- y a lo loco, los de Laso dijeron adiós a Canarias.

HERBALIFE GRAN CANARIA 73-64 REAL MADRID

Herbalife Gran Canaria: Oliver (0), Seeley (6), McKissic (8), Baez (8), Pasecniks (11) -cinco inicial- Rabaseda (2), Mekel (11), Balvin (2), Paulí (8), Eriksson (4), Aguilar (3), Fischer (10).

Entrenador: Luis Casimiro.

Real Madrid: Campazzo (3), Rudy (0), Taylor (4), Reyes (0), Ayón (17) -cinco inicial- Carroll (14), Causeur (4), Yusta (-), Randolph (2), Doncic (6), Kuzmic (4), Thompkins (10).

Entrenador: Pablo Laso.

Árbitros: Pérez Pérez, Cortés, Aliaga.

Parciales: 24-17 | 13-11 | 14-11 | 22-25

Incidencias: Partido correspondiente a la semifinal de la Supercopa de España que se disputó en el Gran Canaria Arena.