Este viernes, Sergio Llull se llevaba el gran palo de ver cómo el Real Madrid no se clasificaba para la final de la Euroliga. Fenerbahçe les vencía y les dejaba con las ganas de disputar una nueva final en la máxima competición europea. A pesar de este varapalo, este sábado, el base madridista se ha llevado una alegría. Ha sido elegido el MVP del torneo.

La gran temporada de Llull a los mandos del Real Madrid le ha valido para conseguir este galardón individual, uno de los pocos que le quedan. El balear ya fue elegido para formar en el mejor quintero de la competición. Un reconocimiento más para uno de los mejores jugadores del continente, que tendrá un sabor agridulce por la imposibilidad de poder sumar este domingo una nueva Euroliga a las vitrinas madridistas.