El Real Madrid ha vuelto a hacer historia. Desde 1987 ningún equipo había dejado su pabellón imbatido, y fue el Barcelona de Aíto con Epi y Solazábal en pista los que lograron por última vez dejar su casa como un fortín inexpugnable. En ese año, el equipo catalán logró un 18-0, ampliamente superado por el 24-0 que ha logrado el equipo blanco en el 2016. 

Esta gesta se ha visto 51 veces realizada por 16 equipos diferentes desde que naciera la competición en 1957. Curiosamente, es el Real Madrid el que más veces ha conseguido acabar un año natural sin conocer la derrota en casa, que con 23 años sumando el 2016 es el equipo más duro de derrotar cuando juega delante de su afición. Al equipo blanco se les debe sumar el ya citado Barcelona Lassa, el Joventut y el Estudiantes, los cuales vivieron sus mejores años en las décadas de los sesenta y los setenta. Además, desde que la competición cambió su formato y se implementaron los playoffs, solamente el equipo catalán y el equipo madrileño han sido capaces de lograr esto, pues la dificultad se incrementa. 

La racha comenzó en la jornada número 15 de la pasada temporada, en un partido en el que el Real Madrid derrotó al Baloncesto Sevilla (ahora Real Betis) por 107-83, y este nuevo récord llegó en la jornada número 13 de la actual temporada de la ACB. El equipo de Pablo Laso recibía al Rio Natura Monbus Obradoiro tras haber caído en Turquía ante el Darussafaka Dogus, y necesitaba la victoria para recuperar sensaciones y certificar la gesta. En un partido que al final del primer cuarto se apreciaba como complicado, se quedó todo en un espejismo. Al final de los 40 minutos reglamentarios, el marcador del WiZink Center reflejaba un 106-59 final. 

EL ACIERTO OFENSIVO, DETERMINANTE

En los manuales de todo entrenador siempre está escrito a fuego que los tropiezos en tu propio pabellón no se pueden permitir. Pablo Laso le ha dado una personalidad y una identidad propia al club, y un estilo de juego definido en el que se explota la calidad ofensiva de todos y cada uno de sus jugadores. 

Esto ha propiciado que en el WiZink Center se hayan visto recitales ofensivos constantemente en 2016. En ocho partidos han logrado pasar de los 100 puntos, y solamente en tres encuentros no han podido anotar más de 90 puntos. El acierto desde el triple es, quizás, el arma más poderosa de este Real Madrid, que cuenta con excelentes triplistas, desde exteriores curtidos en la anotación como Sergio Llull o Jaycee Carroll a interiores con buena mano como Anthony Randolph o Trey Thompkins. 

Otro factor a tener en cuenta es la calidad de la plantilla. El Real Madrid cuenta con un roster de los más completos y con, posiblemente, mayor calidad individual. El WiZink Center, además, ha sido espectador de que todos los jugadores son capaces de aportar. Un día es Sergio Llull, otro día es Luka Doncic, otro es Anthony Randolph... todos los jugadores suman, y por ello se entiende este nuevo récord del equipo de Pablo Laso.