Con apenas 30 años Yulia vio una oportunidad en la venta on line, algo que le pareció perfecto para compaginar con su vida familiar ya que acababa de tener un bebe. Esto le llevó a buscar prendas para reducir y moldear su figura, lo que no sabía es que se convertiría en un próspero negocio familiar.

Inmersa en este nuevo mundo comenzó a crear su propia línea Dulcelife origina. www.dulcelifeoriginal.com. Que comenzó con una inversión de apenas 200 euros.

Pero el boca a boca fue rápido, gracias a la calidad del producto y al saber hacer de Yulia y su marido Tarek, el negocio fue creciendo y también la comunidad que les sigue fielmente en las redes sociales.

La cercanía de Yulia @yulia_adil y Tarek @tarik_adil_naa, su sinceridad y sobre todo el tiempo y mimo que dedican a sus clientas se nota.

Para ellos su máxima es poder popularizar estas prendas que tanto ayudan a mujeres y hombres y tener unos precios asequibles.

Tarek y Yulia

Sobre todo porque estas prendas no son solo moldeadoras para lucir vestidos de infarto en fiestas elitistas. Sino que también las usan a diario tanto trabajadores como deportistas, personal de limpieza, taxistas, dependiet@s, etc.

Sobre todo una de sus prendas estrella: El chaleco Deportivo que además de su efecto sauna para reducir volumen, también corrige la postura de la espalda.

Puede ser que el gran éxito de esta empresa se base en que es un fiel reflejo de Yulia y Tarek. Yulia de origen Ruso y Tarek de origen marroquí, los dos están acostumbrados a romper estereotipos. Tarek fue el primero en apoyar a su mujer y ayudarla en todo a emprender con este sueño.

Y con esta visión de no ceñirse a los patrones y ver posibilidades nuevas han creado este modelo de negocio poco convencional pero que les funciona.

Han sido de los negocios pioneros en vender solo por redes sociales o Whatsapp y en ofrecer pago contra reembolso. Algo arriesgado y poco usual pero que para muchas de sus clientas es un factor determinante a la hora de elegirlos.

Tarek y Yulia

Dulcelife encuentra su éxito en la cercanía y la empatía con sus clientas.
Y aunque el producto no es el más caro del mercado tampoco es el más barato. Pero es un precio que pagan con gusto las seguidoras de la marca porque tienen la confianza y la satisfacción de estar comprando Dulcelife.

Y es que no hay fórmulas mágicas, pero cuando te esfuerzas eres transparente y coherente con tu modelo de negocio. Los clientes lo notan, lo reconocen y lo valoran. Y ese es el mensaje que nos quiere dejar esta familia de emprendedores.

Apuesta por tus sueños, con mimo, calidad y honestidad. Y verás llegar tu recompensa.