En la actualidad se puede observar como cada vez más jóvenes usan un smartphone, portátil o una tablet. Además, la edad en la que comienzan a usarlo es cada vez más temprana. Esto es algo que se está convirtiendo en normal. Aunque hay grupos en los que esto es una excepción, aunque resulte extraño, los líderes tecnólogos de Silicon Valley limitan el uso de estas tecnologías a sus hijos.

Varios artículos en medios americanos, como The New York Times, así lo muestran. Uno de los aspectos más importantes es que estas personas que trabajan en Silicon Valley conocen de cerca esta tecnología, como smartphone o tablets. De modo que son también conocedores de sus posibles riesgos, por lo que limitan el uso y acceso de sus hijos a la misma.

Silicon Valley prefiere limitar el uso de su tecnología

Hay multitud de ejemplos de directivos o trabajadores con puestos de responsabilidad de empresas de Silicon Valley que se muestran muy reticentes a que sus hijos usen dispositivos con pantallas táctiles. Ya sea un smartphone, tablet o un ordenador. Hace años que se revelaba que el propio Bill Gates había impedido a sus hijos usar un ordenador hasta que no tuvieran una determinada edad. No es el único en este sentido.

Directivos de otras empresas clave en Silicon Valley como Facebook, Google o Apple también lo han expresado. Recientemente fue Tim Cook, el CEO de Apple uno de los últimos en hablar sobre el tema. Afirmaba que prefería limitar el uso de la tecnología en los colegios, donde en la actualidad se usa una tablet o portátil de manera constante. También que no deseaba que su sobrino, todavía un niño, hiciera uso de redes sociales.

Por tanto, muchas personas en este lugar con esta misma opinión. ¿Por qué piensan de esta manera en Silicon Valley? ¿Qué les lleva a hacer estas declaraciones?

Psicología y expertos sobre las pantallas

Uno de los principales argumentos para evitar que niños usen las pantallas de tablets o smartphones de manera constante, es que se deben desarrollar primero algunas habilidades en dichos niños. Pero, el uso de pantallas de una manera constante supone un impedimento para ello. Es decir, los niños tienen que aprender muchas cosas antes de que se pongan a usar pantallas de manera constante. Sino, supone un importante problema en su desarrollo y educación.

Muchos psicólogos, además de médicos y otros expertos en la materia, coinciden en que hay evitar el uso temprano de dichas pantallas por parte de los niños. De hecho, la Academia Americana de Pediatría recomienda a los padres que hasta los dos años nada de pantallas. Entre los dos y los cinco años máximo una hora diaria, pero con contenidos de calidad, además de estar supervisados por los padres en todo momento.

Además, es esencial que haya siempre un adulto presente. No se puede dejar a un niño con una tablet o smartphone sin supervisión. Uno de los motivos para ello es para orientar sobre los contenidos que se deben consultar. Aunque en este tipo de casos conviene usar también el control parental, en tablets y smartphones Android. Para lo que hay también aplicaciones.

Los problemas no afectan solo a niños, también adolescentes se pueden ver afectados. Si bien es mucho más complejo controlar el uso que un adolescente hace de un smartphone o tablet. Además, hay algunos estudios que relacionan un uso excesivo del smartphone con problemas mentales como la depresión. De hecho, se estima que un mayor uso del mismo, aumenta las posibilidades de sufrir depresión.

¿Brecha digital entre ricos y pobres?

Otro fenómeno relacionado con esto, que también varios medios recogen, es la denominada brecha digital entre los ricos y pobres. Probablemente sea un término poco conocido, si bien cada vez más medios y análisis hablan de esta brecha como un problema que es necesario tener en cuenta.

Hace años, las familias con rentas más altas eran las que tenían acceso a la tecnología, de smartphones o tablets. Mientras que aquellas personas con rentas bajas no tenían acceso. Por eso, los niños de familias ricas, como las de Silicon Valley, tenían una ventaja en dicho sentido. Porque conocían y sabían manejar la tecnología perfectamente. Esto es algo que les podía ser de ayuda en sus estudios o posterior carrera profesional.

Con el paso del tiempo la tecnología se ha ido expandiendo por el mercado. De modo que también personas con rentas bajas tienen acceso a la misma. Es habitual que en una casa haya un ordenador o una tablet, además de algún smartphone. Lo que permite que todo el mundo tenga acceso a la tecnología. El problema es que esta brecha digital ha dado un vuelco.

Porque en la actualidad, los hijos de familias ricas como los de Sillicon Valley, tienen acceso a otras muchas alternativas. No tienen que pasar el tiempo sentados frente a una pantalla. Especialmente a la hora del ocio pueden acceder con mayor facilidad a otras opciones. Pero, por el contrario, las personas con rentas bajas no tienen esta posibilidad. De modo que usan también dichas pantallas en sus ratos libres.

Por eso, aunque la gente con rentas elevadas domine la tecnología, saben también que un uso abusivo de la misma no es bueno. De manera que buscan alternativas, especialmente en el caso de los niños. Por lo que buscan otras actividades para los hijos, con las que puedan estar alejados de las pantallas el mayor tiempo posible. Pero esto no pasa, con tanta frecuencia, en personas con unas rentas más bajas o un menor nivel educativo.

¿Qué hay que hacer?

Para los padres es siempre algo complicado, el saber qué es lo mejor que se puede hacer en estas situaciones. No se puede negar que los smartphones y las tabletas han venido para quedarse en el mercado. Pero es importante enseñar a los niños a hacer un uso responsable de estos productos. Ya que también pueden ser de utilidad en su educación y desarrollo, siempre y cuando se haga un uso correcto de los mismos.

Un problema habitual es que se recurre al smartphone o la tablet cuando el niño se aburre o si está enfadado. Esto es algo que no ayuda a educar a los niños en uso saludable de estos productos. Además, en muchos casos lo hacen sin que haya supervisión de un adulto. Por lo que dejan que naveguen sin control, sin conocer qué es adecuado y qué no.

Es importante que los padres sepan establecer límites y educar a sus hijos en un buen uso de sus smartphones, tablets o portátiles. De esta manera, no se hará un uso excesivo de estos dispositivos, sino que será un uso responsable por parte de ellos. Algo que sin duda puede prevenir muchos problemas.