Las catorce historias que configuran No todo el mundo tienen un tema común –el amor– que es en ellos alfa y omega, un argumento que se explora en profundidad. Las ha creado Marta Jiménez Serrano (Madrid, 1990), como también el poemario La edad ligera (accésit del Premio Adonáis 2020) y la novela Los nombres propios (2021).

No todo el mundo

Marta Jiménez Serrano

Sexto Piso, 2023. 210 páginas. 18,90 €

La autora imprime a su escritura un ritmo vertiginoso y su obra —perspicaz, amena y a menudo divertida— se lee con rapidez. Pero, además, conoce bien la técnica, el valor del punto de vista, la efectividad del narrador y el lugar preciso que debe ocupar la voz autorial dentro del texto; y tiene un oído finísimo para captar los diálogos de jóvenes y mayores. De ahí que consiga sacar el máximo partido a cada narración.

Además, hay en estos relatos una intención de jugar con el lenguaje, con los paralelismos, con la ambigüedad; y de hacer de la ironía un modus operandi capaz de darle la vuelta al sentido más evidente del discurso.

[La amistad imaginaria de Marta Jiménez Serrano]



Como señalé, en No todo el mundo se exploran las infinitas facetas del amor, que invariablemente se analizan desde una perspectiva rabiosamente actual. La edad de los enamorados (y desenamorados) no importa. Por aquí desfilan personajes adolescentes, veinteañeros a punto de acabar el doctorado, jóvenes profesores de instituto, mujeres laceradas por el puerperio, maduros separados en busca de su identidad y una septuagenaria que descubre el vértigo de la seducción tras los escombros de una vida en la que siempre fue un objeto útil e invisible.



Elo y Elo quieren dejarlo (¿o no?); Pablo y Pati lo dejaron y el nuevo novio de ella deja de estar celoso cuando sabe que Pablo está con Leonor; Eva quiere a Pedro, aunque ya es más difícil compartir su amor con la pequeña Rita; Nerea, joven, inteligente y con ganas de hacer carrera, está fascinada por un director de cine ya en la cincuentena; Alicia acaba de ser madre y vive el desasosiego de habitar en otro cuerpo y de haber perdido su vida anterior; Noelia mezcla literatura y amor...

Marta Jiménez Serrano tiene un oído finísimo para captar los diálogos de jóvenes y mayores

Los relatos muestran unas relaciones fluidas en las que las mujeres han aprendido que “el aferramiento es lo contrario al vínculo”, como dice André Green, mientras los hombres, ahora en el punto de mira, quieren mostrar que son buenos tíos. Estas historias están ancladas a la cultura de un tiempo (el nuestro) y a una ciudad (Madrid) que late al fondo de cada página (sus plazas, sus calles, sus líneas de metro…).

A pesar de la concreción, sin embargo, la autora consigue universalizar unas historias que nos conciernen a todos, porque en el fondo habla de las relaciones humanas y reflexiona sobre nuestra sociedad y sobre nosotros en ella, con agudeza y lucidez.