Tras relajarse en Menorca con su novia Gemma Pinto, con su hermano Álex y un grupo de amigos, la vida sigue igual para Marc Márquez en su regreso al trabajo. El líder de MotoGP va descontando los grandes premios para conseguir su novena corona de campeón del mundo en la que va a lograr unos números de récord tras lograr su duodécima victoria de 13 posibles -la sexta consecutiva- en la carrera al sprint en el Red Bull Ring de Spielberg.
Estímulos le sobran al líder de MotoGP, pero la caída en la sesión de clasificación y la presencia de Valentino Rossi en el Red Bull Ring de Spielberg seguro que le dieron una motivación extra.
Escasos minutos de comenzar la carrera al sprint, ambos se cruzaron en el pit lane. Marc Márquez iba camino de la parrilla y Il Dottore volvía al garaje de su equipo tras aconsejar a sus pilotos. Los hicieron como que no se vieron y ni se miraron, pese a pasar a escasos centímetros el uno del otro.
El líder de MotoGP, que partía desde la cuarta posición, salió como un tiro y se colocó segundo, detrás de su hermano Álex, mientras que Pedro Acosta remontó rápidamente desde la séptima plaza y no tardó en atacar a Marco Bezzecchi para situarse tercero.
Marc Márquez se lo tomó con calma y dejó que su hermano Álex cogiera una renta de casi medio segundo, pero cuando los neumáticos empezaron a caer de rendimiento fue el momento de atacar.
Pasado el ecuador de la carrera volvió a pegarse a la estela de su hermano Álex y cuando restaban cinco vueltas para el final no se lo pensó dos veces para superarle.