Siempre sabe buscar una solución cuando las cosas se complican o surge un problema. Como le ocurrió en la carrera del domingo de Tailandia, la baja presión de los neumáticos obligó a Marc Márquez en Brno a dejarse pasar por Pedro Acosta cuando lideraba la carrera al sprint. Lo mismo le sucedió a Pecco Bagnaia, su compañero de equipo, cuando marchaba segundo aunque el italiano no supo gestionar la situación y acabó séptimo.
El líder de MotoGP supo sobreponerse al contratiempo y gestionar a la perfección una situación que después le llevó a sumar su undécima victoria de la temporada en la prueba de los sábados. De esta forma, ya cuenta en la clasificación general con una ventaja de 95 puntos sobre su hermano Álex, que terminó decimoséptimo, y 156 sobre el italiano.
El drama de la presión de los neumáticos para los pilotos del equipo oficial de Ducati llegó en la quinta vuelta, cuando Pecco Bagnaia dejó pasar a Fabio Quartararo y acabó quinto. Marc Márquez hizo lo mismo una vuelta después, cuando rodaba en cabeza con más de dos segundos y medio de ventaja sobre Pedro Acosta.
Dejó pasar al piloto de KTM y se quedó detrás de él tres vueltas, las justas para que la presión del neumático delantero subiera hasta llegar a lo estipulado por el reglamento. Cuando vio que estaba de nuevo dentro del límite oportuno, rebasó sin contemplaciones a Pedro Acosta cuando restaban dos vueltas para el final y tiró sin contemplaciones para ir a por la victoria.