Marc Márquez pasará por chapa y pintura. El piloto de Honda está de camino a Barcelona para ser operado del hombro derecho que se dañó en la caída durante la jornada del lunes de los test en Jerez. El '93' sufrió una subluxación en la articulación que ha preferido intervenir cuanto antes para que no le provoque problemas durante la temporada.

El siete veces campeón del mundo de la categoría se cayó en la curva Jorge Lorenzo en el inicio de los entrenamientos de equipos del Mundial de MotoGP que se han desarrollado estos dos días en el circuito gaditano. En la jornada de este martes ha trabajado haciendo un gran esfuerzo para probar el prototipo de la moto de la próxima temporada.

Una de las razones de ese esfuerzo podría ser porque tenía previsto operarse en cualquier caso de ese hombro que ya tenía tocado desde la caída en Malasia. Tras esta operación no tiene seguro llegar a los test de Sepang.

Evitar que se le salga

"Como todos saben, el invierno pasado fue muy difícil para mí con la operación en el hombro izquierdo, que estaba muy, muy dañada. Quiero evitar la situación en la que mi hombro derecho está en esta condición en el futuro, así que hablé con los médicos para ver cuáles eran nuestras opciones", rezaba el comunicado que emitió el equipo Repsol Honda.

Márquez también explicaba que "antes de Motegi tuve algunos problemas con el hombro y luego, después del accidente en Malasia, tuve una subluxación, y aquí en Jerez tuve otra subluxación, por lo que decidimos con los médicos que era mejor someterse a una cirugía para evitar la situación que teníamos con el otro hombro". Aún no tener asegurada su presencia en los próximos test, el piloto anuncia que trabajará "de la misma manera que el pasado año para llegar".

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