El pasado 13 de septiembre, en Singapur, Fernando Alonso aseguraba: "Estoy comprobando algunas cosas. En un mes espero tenerlo todo listo y decidido". El tiempo corre y, a poco más de diez días para que finalice el plazo dado por el propio ovetense, aún no se sabe nada sobre la nueva vida del dos veces campeón del mundo de Fórmula 1.

Tras lo ocurrido los últimos años, lo único que es seguro es que Alonso quiere volver a ser competitivo allá donde compita. El asturiano tiene sed de victoria y sueña con conquistar la triple corona (GP Mónaco F1, 24 Horas de LeMans y 500 Millas de Indianápolis).

El calendario más complicado de su carrera

Para Alonso competir mucho no es un problema. Este 2018, el asturiano se ha sometido a un calendario de lo más exigente: 21 pruebas del Mundial de Fórmula 1, más 5 del Mundial de Resistencia, más las 24 Horas de Daytona que disputó en enero. 27 carreras en un año, lo que supone más de una cada dos semanas. El ritmo frenético de competición puede repetirse en 2019.

El principal problema para Fernando Alonso la próxima temporada será el calendario. Su objetivo es acabar la supertemporada del Mundial de Resistencia (WEC) que finalizará con la edición de 2019 de las 24 Horas de LeMans

El coche de Fernando Alonso logró la pole en 24 horas de Le Mans Efe

Contando la próxima cita del WEC, el campeonato tiene por delante cinco carreras antes del final de temporada: 6 Horas de Fuji (14 de octubre 2018), 6 Horas de Shanghai (18 de noviembre 2018), 1.000 Millas de Sebring (15 de marzo 2019), 6 Horas de Spa-Francorchamps (2 de mayo 2019) y las 24 Horas de LeMans (15 de junio 2019).

A las 3 citas del WEC en 2019 habría que sumarle las 17 pruebas del calendario 2019 del campeonato de la Indycar. 20 carreras totalmente compatibles dado que ninguna de ellas coinciden en el tiempo a las que se podrían sumar otras.

El Mundial de Resistencia y la Indycar podrían no ser suficiente para Alonso en su primera temporada lejos de la Fórmula 1 tras 19 años dentro del Gran Circo. El asturiano ha tenido varios guiños hacia la Nascar. La gran competición automovilística de Estados Unidos sueña con que el piloto español se sume a uno de sus coches en alguna de sus pruebas.

La cita elegida por Fernando Alonso serían las 500 Millas de Daytona (17 de febrero), otra de las pruebas más emblemáticas del automovilismo mundial perteneciente al campeonato de la Nascar y similar a la importancia que las 500 Millas de Indianapolis tienen para la Indycar. El único problema para competir en la cita de la gran competición estadounidense sería la proximidad al test de pretemporada de la Indy que se celebrará el 12 y 13 de febrero en el circuito de Las Américas (Texas, EEUU).

Fernando Alonso, con el monoplaza con el que participó en la IndyCar (500 Millas de Indianápolis). REUTERS

Las 21 citas a las que se enfrentaría Alonso en 2019 serían las mismas a las que tendría que disputar si continuara en la Fórmula 1 pero supondrán un reto aún más complicado puesto que pilotará en tres competiciones muy diferentes.

En la resistencia pilotará uno de los denominados 'prototipos LMP1' de Toyota; en la Indycar irá al volante de un monoplaza muy básico, aerodinámicamente hablando en comparación con un F1, y tendrá que rodar tanto en óvalos como en circuitos; por último, en la Nascar se subirá por primera vez a un coche de competición totalmente distinto al resto de vehículos que ha pilotado en su carrera y se someterá al ritmo frenético y escalofriante que tienen estas carreras.

Alonso no está solo: McLaren sigue sus pasos

"Mi tiempo en la Fórmula 1 ha terminado". Así de claro habló Fernando Alonso para la prensa internacional en la previa del Gran Premio de Rusia. El ovetense ha dado carpetazo al Gran Circo, cerrando la puerta a cualquier regreso, pero la despedida no es una ruptura con McLaren. La factoría de Woking dispuesta a seguirle allá donde vaya.

"Quiero ser el mejor piloto del mundo. En Fórmula 1 ya he conseguido más de lo que pude soñar. Batí a Schumacher aquí. Hay otras categorías que me ofrecen más desafíos ahora. Otras maneras de entender las carreras. La F1 es más pequeña en otros sitios", afirmaba el asturiano explicando, una vez más, su decisión.

Fernando Alonso, en su cuarta temporada consecutiva, y Stoffel Vandoorne, en su segundo año, pilotos de McLaren.

A falta de confirmación oficial, Alonso llegará a la Indycar de la mano de McLaren y Andretti Autosport, en lo que será una reedición de la fórmula que rozó el éxito en las 500 Millas de Indianapolis en 2017. La escudería inglesa no ejercerá en esta ocasión de fabricante sino de sponsor del coche que pilotaría el español.

Dentro de la futura relación entre Alonso y McLaren, los de Woking podrían ofrecer una alternativa al español para completar todas las pruebas del campeonato de la Indycar, haciendo así más cómoda la temporada del asturiano. Stoffel Vandoorne no seguirá la temporada que viene en la Fórmula 1 y podría ser el comodín si el dos veces campeón del mundo de F1 decide competir sólo algunas carreras de la Indycar como estrategia para preparar mejor determinadas citas del campeonato.

"Vandoorne es un piloto extremadamente rápido y muy constante. Creo que sería un gran piloto en Sportscars y en IndyCar. Pienso que podría ser un buen piloto de Fórmula 1, pero hemos tenido dos años complicados. Tenemos una buena relación y la situación es complicada cuando no renuevas a alguien, pero él es un profesional. Somos fans de él. McLaren correría con él en otra categoría y sería genial que su historia con McLaren continuara", declaró Zak Brown, Director ejecutivo de McLaren F1 Team, en una entrevista concedida a Racer.

Noticias relacionadas