Pep Guardiola perdió este miércoles los papeles y, a la finalización del partido Manchester City - Southampton de Premier League, se encaró con el futbolista rival Nathan Redmond, al que estuvo muy cerca de agredir.

El técnico del Manchester City, visiblemente cabreado, se enzarzó con el jugador inglés después de que su equipo ganara por 2-1, con un gol de Raheem Sterling en el minuto 96, el último del partido, un tanto que le vale al conjunto 'citizen' para continuar en el liderato de la Premier League con ocho puntos de ventaja sobre el Manchester United.

Al técnico catalán, que portó un partido más el lazo amarillo en solidaridad con lo que él considera "presos políticos", se le vio muy nervioso a la finalización del partido y fue a hablar de forma airada con Redmond, sin que se conozcan los términos de la discusión. Guardiola llegó a empujar en una ocasión al futbolista rival, al que le volvió a tocar segundos después.

Cuando Redmond le interpeló, en una ocasión con una sonrisa, Guardiola le contestó gritando, llegando incluso a acercar su cara con la del jugador en un momento que, visto desde fuera, tuvo mucha tensión.

Según recogen medios ingleses, Guardiola habría reprochado a Radmond las continuas pérdidas de tiempo que habría tenido durante los últimos minutos del encuentro a pesar de "lo bueno que es". "Le dije a Nathan Redmond lo bueno que es, pero no querían jugar, perdían el tiempo", explicó Guardiola.

Guardiola, que ha logrado con el City el mejor arranque en la historia de la Premier (40 puntos de 42 posibles, cediendo un solo empate en 14 jornadas, todavía sin perder), celebró con locura el gol de su jugador que les daba la victoria ante el Southampton.

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