El Camp Nou se ha caracterizado a lo largo de los últimos años por aprovecharse de los grandes partidos que se celebran allí para convertirse en un altavoz sobre algo que va más allá del mero fútbol. En esta ocasión ha sido el partido entre el Barcelona y el Atlético de Madrid el que ha servido para que los culés pidan la absolución de Sandro Rosell.

El pasado mes de febrero, el expresidente del Barcelona fue puesto en libertad tras haber sido acusado de un presunto delito de blanqueo de capitales. Antes de ese juicio, Rosell aseguró que le habían "robado" dos años de vida tanto con sus padres como con su mujer e hijas.

"Me han robado dos años de mi vida con mis padres cuando más lo necesitan porque son mayores y me necesitan a su lado. Me da mucha pena también estar lejos de mis hijas y de mi mujer. En estos dos años no he podido celebrar ni los 18 años de mi hija ni los 25 años de casado con mi mujer", señaló entonces.

Sandro Rosell en la Audiencia Nacional. EFE

Después, ya a mediados del mes de marzo, la Fiscalía redujo la petición de cárcel de once a seis años y su defensa espera que se le acabe absolviendo, ya que el abogado de Rosell defiende que no se han probado los delitos económicos por los que ha permanecido en prisión hasta ahora.

La afición, con Rosell

Desde la casa del Barcelona se ha roto una nueva lanza en favor del expresidente azulgrana. El Camp Nou pide la absolución, al igual que la defensa de Sandro Rosell, alejándose una vez más de lo más puro futbolístico para involucrarse en temas que nada tienen que ver con el mundo del deporte.

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