Ousmane Dembélé ha protagonizado algunos actos indisciplinarios al llegar tarde a dos entrenamientos. El Barcelona quiere que se terminen estos hechos del joven jugador y por ello ha puesto varias reglas al futbolista francés para cambiar su actitud y tenerle más controlado.

El principal problema del jugador, a diferencia de muchos que adoran las fiestas, es su pasión por las series y los videojuegos, por lo que se queda hasta largas horas de la madrugada pegado al televisor. Sus compañeros han comentado que su actitud no es mala y "es un buen chico", pero que "no se entera de cuando tiene que entrenar" y dan esa explicación a sus retrasos a los entrenamientos.

Ousmane Dembele REUTERS

Las medidas del Barcelona

El conjunto catalán ha tomado medidas para terminar con los retrasos, entre estas medidas se encuentran que tiene prohibido apagar o dejar en silencio el móvil por la noche. De esta manera el club se quiere asegurar de poder avisar al jugador cuando haya riesgo de que se haya quedado dormido.

El equipo sigue achacando a sus representantes la poca atención al futbolista, lo que repercute en su comportamiento. El extremo del Barça ha sido sancionado con 200.000 euros de multa por el retraso del entrenamiento del pasado domingo; los blaugranas esperan que el jugador que costó 150 millones comience a tener la misma actitud fuera del campo que tiene dentro de él.

BARCELONA - VILLARREAL Quique García Agencia EFE

El jugador se encuentra en un buen estado de forma y comienza a ser un hombre importante para Valverde. Su juego está siendo bueno y el gol contra el Tottenham el pasado martes en la Copa de Campeones lo reivindicó, pero su actitud sigue siendo mejorable fuera del campo y el club quiere encauzar al jugador para convertirlo en uno de sus exponentes.

[Más información en: Dembélé la vuelve a liar: llega dos horas tarde al entrenamiento del Barcelona]

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