Primero como humorista, luego como actriz y ahora como presentadora de televisión, si algo ha caracterizado la trayectoria de Paz Padilla (50 años) delante de las cámaras ha sido su simpatía, representada a través de una sonrisa casi perenne. Sin embargo, en su vida personal, la gaditana está atravesando momentos complicados.

Los problemas de salud se han convertido, por desgracia, en una constante en la familia de la ahora presentadora de Got talent, entre otros programas. Su actual marido, Juan Vidal, y su hija Anna Ferrer (22), han tenido que pasar por el hospital recientemente, aunque en esta ocasión el asunto que abordamos es la enfermedad que sufrió la propia Paz Padilla.

Lo primero que hizo saltar las alarmas fue la cancelación de la función Desatadas, que estaba programada en el Teatro Olympia de Valencia. En ese momento se especuló con que este contratiempo estaba ligado a los problemas de salud de Juan Vidal, pero fue la propia Paz Padilla quien lo explicó en antena, durante una de las entregas de Sálvame. "He estado malita. He sufrido un cólico nefrítico, ya estoy mejor, aunque un poco dolorida. Es la primera vez que tengo que suspender una función", lamentó.

El problema en cuestión

Paz Padilla explicando su dolencia en 'Sálvame'. Mediaset

Sin perder una pizca de su gracia habitual, la gaditana contó que "los médicos me han dicho que tengo cálculos. Yo, que nunca he aprobado Matemáticas, ahora tengo cálculos. Una, que ya no puede hacerse mayor". Pero, ¿en qué consiste este problema de los cálculos? Se denomina así a las piedras que se forman en la zona del uréter y que causan un dolor lumbar muy intenso, acompañado de náuseas, malestar general e incluso vómitos.

En la mayoría de los casos, el cólico nefrítico llega a su fin cuando el paciente expulsa la piedra mediante la orina, aunque si el cálculo es muy voluminoso y permanece demasiado tiempo obstruyendo la zona puede llevar a la pérdida definitiva de la función renal, por eso conviene actuar con cierta celeridad en estos casos y ponerse cuanto antes en manos de los médicos, sobre todo cuando el paciente tiende a sufrir este problema con cierta asiduidad.

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