María Iborra Forqué (31 años) visitó a su madre, la actriz Verónica Forqué, el pasado lunes 13 de diciembre en su domicilio del distrito de Chamartín y poco antes del mediodía abandonaba la casa. Apenas pasaron un par de horas cuando la joven conoció la fatal noticia: su querida madre había decidido quitarse la vida. María necesitó el apoyo de su novio para volver a ese lugar en el que solo unos minutos atrás había estado compartiendo confidencias con su progenitora; la Dj se mantuvo fuerte ante los medios, pero pronto estalló y las cámaras captaron sus lágrimas en la intimidad de su coche.

La joven permaneció callada durante días. Cinco días. Pero el sábado 18 de diciembre por la noche rompió su silencio demostrando que la esencia optimista y vital de la genuina Verónica Forqué permanece muy viva en su heredera. "La muerte no existe. Ahora mi madre está conmigo y con todos los que la aman", escribía María junto a varias fotografías antiguas de su madre que compartió a modo de Stories en su perfil de Instagram.

Sin embargo, no fue hasta un día más tarde cuando decidió publicar un contenido muy especial. "Mi mamá me grabó este vídeo", desvelaba la joven al mostrar unas imágenes en las que se la ve posando con un atrevido vestido negro, una mascarilla con luces láser y una diadema de orejas de conejo mientras es Verónica Forqué la que ejerce de cámara. De hecho, se puede oír la voz de la actriz y como da instrucciones de poses a su hija.

Este vídeo no solo prueba la gran complicidad y confianza que tenían madre e hija, así como la admiración mutua que siempre afirmaron profesarse. Detrás de estas imágenes existe una historia que en estos momentos, tras la muerte de la inimitable Forqué, cobra especial relevancia.

La única hija de Manuel Iborra y Verónica Forqué ha querido recuperar un vídeo que le grabó su madre el 20 de julio de este año, según ha podido conocer este medio. En aquella fecha nada hacía presagiar el trágico final de la veterana actriz, pero la realidad es que en mitad de ese periodo estival fue cuando la intérprete notó que "su cuerpo le dijo 'basta'".

María Iborra y su madre, Verónica Forqué, sentían admiración mutua. Gtres

Así lo expresó la propia Verónica en plena semifinal del programa MasterChef Celebrity en el que participaba. De hecho, fue en torno a esta fecha en la que se tomó el vídeo compartido por su hija cuando la actriz anunció a la productora y sus compañeros que quería abandonar el concurso culinario de TVE. Teniendo en cuenta que las grabaciones de MasterChef comenzaron a principios de mayo y que el programa duró tres meses, la fecha del vídeo de María Iborra y el abandono televisivo de Forqué coinciden. Por aquel entonces, tal y como la propia Verónica confesó, se encontraba ya sin fuerzas y sin poder seguir adelante con la presión que exigía el formato de la cadena pública.

La actriz ya vivía un momento delicado, pero precisamente por eso se refugió en su mayor apoyo, su aliada y el tesoro de su vida: su hija. Verónica veía en María esa fuerza empoderada que quizá a ella le faltaba -al menos en sus últimos años, porque en los inicios de su carrera fue conocida por su valentía y transgresión-. La heredera de Forqué es una mujer que no entiende de tabúes ni de censuras. Dan prueba de ello sus fotografías de Instagram donde reinan los desnudos, los sujerentes posados, los estilismos imposibles y el uso de filtros surrealistas y elementos visuales que superan lo terrenal. Quizá por eso, María, que desde su creatividad siempre ha puesto la mirada más allá de este mundo, sigue sintiendo a su madre a su lado, de forma abstracta pero presente.

[Más información: Primeras palabras de María, hija de Verónica Forqué: "Mi madre está conmigo y con todos los que la aman"]