Esther Doña (42 años) y Santiago Pedraz (63) están viviendo su primer verano de enamorados y, una vez oficializado el romance, la empresaria ha decidido compartir algunos felices momentos de esta incipiente relación en sus redes sociales.

La socialité y el juez han recorrido estas semanas algunos de los puntos de la geografía española más demandados en verano. Comenzaron sus vacaciones con una estancia en Altea, en la Comunidad Valenciana, y más tarde regresaron a Madrid. Poco después pusieron rumbo a un destino rural donde disfrutaron de la naturaleza. Y tras esta necesaria desconexión del ruido urbano, su siguiente destino ha sido la tierra natal de Esther, Málaga. En concreto se han desplazado hasta Marbella, una información que la propia Esther ha revelado en su perfil de Instagram.

Santiago Pedraz y Esther Doña se encuentran en un enclave paradisíaco de Marbella. IG @estherdona_oficial

El magistrado de la Audiencia Nacional y la empresaria han disfrutado de una estancia en un club de playa que encarna el lujo marbellí más vanguardista. Se trata de La Cabane Beach Club y está ubicado en el hotel cinco estrellas Los Monteros Spa & Resort. Ha sido ella quien ha hecho públicas un par de fotografías en las que se aprecia el glamour de esta romántica cita. En una de las instantáneas aparece la pareja sobre una cama libanesa vistiendo looks que reflejan elegancia y relax a partes iguales: ella, ataviada con un elegante y minimalista bañador negro de Zara que complementa con grandes gafas de sol; él con polo azul y gafas de estilo aviador. Desde esta privilegiada ubicación se puede observar una vista fascinante de la piscina del alojamiento, con la inmensidad del Mediterráneo de fondo.

Tal y como se describe en la web del hotel, este club de playa tiene todo lo necesario para ser catalogado como emplazamiento paradisiaco: "Es uno de los lugares más elegantes y exclusivos de la Costa del Sol", apuntan en el sitio corporativo. Y lo cierto es que su cuidada decoración de tintes naturales se integra a la perfección con el paisaje marítimo de la zona. Aunque el mar al que se puede acceder de forma directa desde el club se posiciona como su principal atractivo.

Esther Doña disfrutando de las vistas del 'beach club' La Cabane. Redes sociales

Para disfrutar de este lugar se puede escoger entre tres servicios: Hamaca, por 35 euros, Cabaña para dos, por 90 euros y Cama para dos, por 220 euros. Este último, el más cómodo de todos, ha sido el que han preferido Esther y Santiago. Además de atención personalizada, como las otras dos opciones, en este caso, la cuota incluye la botella de champán y el plato de fruta fresca que se pueden ver en las imágenes compartidas por la exmodelo. Asimismo, también se obsequia a los visitantes con toallitas refrescantes y amenities especiales. 

La Cabane cuenta con su propio restaurante, donde se puede disfrutar de un almuerzo con el rugido de las olas como hilo musical y el sol de Marbella iluminando la velada. Su carta se construye en base a la gastronomía local y según cuenta el establecimiento en sus redes sociales "el sabor del mar Mediterráneo se pueden degustar en cada bocado". Para algo más ligero, el beach club también cuenta con servicio de coctelería, unos combinados de estética impecable con los que brindar por un verano infinito.

Algunas de las delicias que se pueden degustar en este club de playa. Redes sociales

El hotel Los Monteros es un impresionante enclave de lujo en la Costa del Sol. En él los tratamientos de bienestar y el golf son dos de sus principales atractivos. De hecho, a la hora de hacer la reserva se pueden seleccionar paquetes que aunan algún tratamiento con esta práctica deportiva. En cuanto a las habitaciones, en agosto, la opción más económica se sitúa en 220 euros la noche. 

Un amor que se consolida

El pasado 20 de agosto, a través de Instagram, la empresaria llevó a cabo un significativo gesto que demuestra la seguridad que tiene en esta nueva etapa que acaba de iniciar en su terreno más íntimo.

Desde la muerte de Carlos Falcó, en la biografía de Instagram de Esther Doña se podía leer: "marquesa viuda de Griñón". Pero aquel viernes dichas palabras desaparecieron. La socialité ha decidido eliminar este título y lo ha sustituido por otra optimista frase: "Comenzando un nuevo capítulo en mi vida con alegría y vitalidad". Este pequeño texto es una gran declaración sobre el momento que vive actualmente junto al magistrado de la Audiencia Nacional.

[Más información: La señal que demuestra que la relación entre Esther Doña y Santiago Pedraz se consolida]