El humorista Miki Nadal (53 años) está atravesando un buen momento personal después de que la justicia haya fallado con la sentencia sobre su divorcio de Carola Escámez, tal y como publicó en exclusiva JALEOS el pasado martes. Por fin, Nadal ha podido dejar atrás un episodio delicado y doloroso en su vida, con una hija en común de por medio, Carmela. Tras meses litigando, el togado ha dictado y ha sido claro en todos los puntos a tener en cuenta.

Este medio ha podido conocer, por parte del entorno de Miki, que "está satisfecho" con el fallo. Simboliza muchas cosas para él. Ha cerrado una etapa en su vida, para abrir otra cargada de esperanza y buenas cosas. Más allá de la manutención de su hija, de la pensión alimenticia, gastos extraordinarios y custodia, Miki y Carola no han tenido que llevar ante el juez mayores cuestiones, pues ni siquiera han existido bienes en común. Durante su relación vivieron en un piso de alquiler y cuando esta naufragó cada cual se fue a su respectiva casa inicial. 

El cómico está exultante, pletórico y así lo ha hecho constar en sus redes sociales en las últimas horas: "La semana pasada fue una de las más tristes de mi vida, pero esta semana estoy de celebración porque he vivido uno de los momentos que más deseaba que llegase desde hace tiempo. Es hora de celebrarlo a lo grande con un buen champán y con todos esos amigos que han estado siempre a mi lado y se alegran de las cosas buenas que me pasan. Voy a reír, voy a bailar, a vivir mi vida". Así lo está haciendo.

No solo tiene motivos para celebrar por el hecho de haber firmado su divorcio: Miki también cuenta con dos poderosas razones para continuar bailando, riendo y viviendo la vidaPor un lado, siendo este apartado el más importante por lo tanto que ha sufrido, el humorista puede presumir de haber puesto el contador a cero con la justicia, como ha podido conocer en exclusiva este medio. Ya ha cumplido con los trabajos para la Comunidad que le impuso un juez tras aquella condena por un delito leve de vejaciones a Escámez.

Nadal llegando a los juzgados de Madrid. Gtres

Aquel, si cabe, fue el golpe que más dañó a Miki Nadal y su entorno. Una acusación con la que tuvo que lidiar el colaborador de Zapeando. El principio de lo que terminó en demanda de divorcio. Hoy, Nadal ha cancelado todos sus antecedentes penales, como ha podido confirmar este periódico. No tiene causas pendientes. Y por si esta razón no fuera suficiente, se desliza a este medio que Miki no puede estar más feliz al lado de su nueva pareja sentimental, Helena Aldea. Ella ha sido, en este tiempo tan convulso, su bálsamo, su contrapunto, su timón. "Está más enamorado que nunca de Helena y no sabes cómo se desvive por ella", cuenta un buen amigo que, prudente, prefiere quedarse ahí. Otra fuente explica: "Los que hemos estado a su lado sabemos cómo lo ha pasado este tiempo, ya no solo por el divorcio, sino por aquello de las vejaciones". Con respecto a su historia de amor, se cuenta que aún no conviven juntos, entre otros escollos por su incompatibilidad de agendas a nivel profesional. Él trabaja y vive en Madrid; Helena tiene su residencia y tienda de ropa en Alicante. Se ven "cuando pueden" y ya habrá tiempo de formalizar y de dar mayores pasos adelante. Ambos saben "que las prisas no traen nada bueno". Están en otro punto en sus vidas, más sereno y pausado. 

Aldea es una exitosa empresaria que, después de haber estudiado Periodismo, optó por dedicarse al mundo de la moda, de la mano de su hermana Ángela. Ambas, emprendedoras, probaron suerte en el mundo empresarial con su tienda de moda Capriche. Todo un acierto. Se trata de una marca muy respaldada y de renombre en el mundo de la moda, televisivo y de la farándula. La marca de las mujeres que sonríen, como se define en la web. Helena es la cofundadora, y rostros tan conocidos como Chenoa (45), Cristina Pedroche (32), Mónica Naranjo (46) o Paula Echevarría (43) la han ayudado con sus lanzamientos, y en la página de la tienda es habitual ver a muchas celebrities e influencer luciendo sus diseños.

Helena y su hermana comenzaron vendiendo ropa multimarca, pero el pasado mes de noviembre lanzaron su propia colección, CaóticaHelena es natural de Alicante, pero es muy habitual verla en Madrid. En la capital tiene buenos amigos y contactos y "es una más" en el entorno televisivo de Miki. Dice alguien que la conoce que rehúye de la fama y que nunca se la verá en el papel couché. Una prueba de esta postura es que sus redes sociales personales son privadas y las únicas que están abiertas al mundo, como es lógico, son las de su tienda. 

[Más información: Miki Nadal y Carola Escámez, ya hay sentencia de divorcio: los detalles y la manutención de su hija]

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