Álex, en un evento.

Álex Lequio lleva casi dos años luchando contra el cáncer. Un tiempo en el que el joven ha  hecho frente a varios altibajos. Los primeros síntomas de que algo no marchaba bien se desarrollaron una noche de marzo, como él mismo explicó en una publicación en Instagram cuando se cumplió el primer año: "Hace un año ya desde la primera noche que me desperté por un 'tirón de espalda' y nos pasamos seis horas andando de punta a punta sin sentido por el cuarto", escribió.

Álex Lequio entrando a la Ruber. Gtres

Tras ese primer susto, el empresario acudió junto a su madre al hospital donde le diagnosticaron cáncer. Álex Lequio, sus padres y la novia que tenía entonces no tardaron en tomar un avión y marcharse hasta Nueva York, donde iniciaron un novedoso tratamiento en el Memorial Sloan Kettering Cancer Center. 

Junto a Álex siempre ha estado su madre. De hecho, Ana Obregón permaneció unida a su hijo en la Gran Manzana durante los primeros meses, dedicados casi exclusivamente a la lucha del joven Lequio contra el cáncer, hasta que en septiembre les dieron una buena noticia: podía comenzar la nueva fase del tratamiento en Nueva Jersey. 

Durante los primeros compases de la enfermedad, Ana Obregón abandonó por completo su vida profesional y se dedicó casi exclusivamente al cuidado del joven. Se centró únicamente a su faceta como madre. 

El hijo de Alessandro Lequio se estaba recuperando, y no tardaron en poder volver a España. La actriz y el empresario regresaron a su país para poder estar más cerca de su familia y continuar el tratamiento en el hospital Quironsalud de Barcelona.

Hasta la fecha, Álex ha tenido que sortear varias recaídas, habituales en la lucha contra el cáncer. "Es una piedrecita en el camino, es una enfermedad larga, lo afrontamos con mucho optimismo", explicó Ana Obregón.

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