La portavoz parlamentaria de Unidas Podemos en el Congreso, Irene Montero (31 años), ha solicitado al Congreso votar de forma telemática en el debate de investidura del candidato socialista, Pedro Sánchez (46), programado para la próxima semana, debido a su avanzado estado de gestación.

El Reglamento de la Cámara Baja establece que sus señorías pueden pedir el voto telemático a la Mesa del Congreso para situaciones de "embarazo, maternidad, paternidad o enfermedad grave" en caso de que se complique su presencia en el hemiciclo. Montero, que espera a su tercera hija junto a Pablo Iglesias (40) para el próximo mes de agosto, ha reclamado al órgano rector del Congreso poder votar a distancia hasta el próximo 2 de agosto, según han confirmado a Europa Press fuentes de la formación morada.

Así las cosas, la dirigente de Podemos no asistirá al Pleno de investidura de la próxima semana, donde los diputados votarán por llamamiento al candidato socialista pronunciando un 'sí', un 'no' o una 'abstención'.

El pasado 13 de marzo, Irene Montero era la encargada de comunicar a través de sus redes sociales la feliz noticia de que estaba nuevamente embarazada. "Ayer a Noelia Vera le jugó una mala pasada el subconsciente en una rueda de prensa, pero no fue por el lenguaje inclusivo sino por ser amiga antes que portavoz. Ella ya sabía que la familia crece. Leo y Manuel van a tener una hermana. Estamos bien, felices y preparadas para cuidarnos mucho y a la vez dar lo mejor de nosotras en estos meses decisivos", comentó. Junto a esas palabras, añadió una bonita fotografía donde aparecía junto a su compañera de partido acariciándole la incipiente 'tripita' de futura mamá. 

La llegada de la nueva hija de la pareja formada por Pablo Iglesias e Irene Montero tendrá lugar trece meses después del nacimiento de sus mellizos, Leo y Manuel, que cumplieron un año el pasado 3 de julio. Los pequeños nacieron en el Hospital Materno Infantil del Gregorio Marañón con tan solo 26 semanas de gestación. Desde ese momento, ambos políticos solicitaron la baja laboral y se centraron en el cuidado de los pequeños, que estuvieron hospitalizados en el citado centro médico durante 90 días para asegurar su correcta evolución y desarrollo. 

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