Encadenada y sentada junto a su inseparable bandera de Venezuela. Así amanece hoy Lilian Tintori (38 años), que lleva días establecida en plena plaza de San Pedro frente al Vaticano para pedir la liberación de su marido y de otros presos políticos de su país. Esta es una más de las acciones reivindicativas de la esposa del opositor venezolano Leopoldo López (45) que hace dos años se entregó a las autoridades tras ser acusado de alentar manifestaciones contra el régimen chavista, por falsa propaganda y por asociación para delinquir. 

Desde el 18 de febrero de 2014, fecha en la que su marido fue encarcelado, Lilian abandera el lema "fuerza y fe" que lleva promulgando desde diferentes puntos del globo por los que ha viajado para dar a conocer la situación de Venezuela. Tintori es una mujer muy creyente, que cada día pide a Dios que se haga justicia por Leopoldo, que pasó de soñar con ser deportista de élite y dedicarse a la Educación Preescolar, a luchar por la promesa que le hizo a su marido el día de la pedida de mano: amar a su país por encima de todo.

Su historia de amor

En un restaurante y con un 'celestino'. Así comenzó su romance en 2003, cuando Leopoldo ya estaba metido en política, y era alcalde del municipio de Chacao. Una noche un amigo en común les presentó mientras compartían mesa en una cena en grupo. Ella misma contaba como fue ese primer encuentre en una entrevisa reciente: "Conversamos de sus proyectos de vida, de su amor por Venezuela, de su carrera y de cómo estaba siendo perseguido políticamente. Nos quedamos hablando toda la noche, fue fascinante porque no se acababan los temas de conversación". Por casualidades de la vida, López estaba buscando un asesor deportivo y ella, que era una gran atleta y ese mismo año se coronó campeona nacional de kitesurf, era la persona idónea para ayudarle.

Lilian Tintori y Leopoldo López el día de su boda, el 19 de abrol de 2007.

Tres años después, con una relación ya consolidada, Leopoldo decidió hacerle las dos preguntas más importantes para él y que serían el comienzo de su futuro. De rodillas, pronunció:"Lilian, ¿quieres casarte conmigo?", tras recibir el "sí" de su protagonista, continuó, "¿y quieres casarte con Venezuela?". Aceptar esta segunda cuestión era indispensable para llevar a cabo la primera, porque sería el principio de su camino juntos del que ahora todo el mundo es testigo. Se convirtieron en matrimonio el 19 de abril de 2007.

Cuando les quedaba tiempo libre en medio de su batalla por los derechos de los venezolanos, la pareja planeaba excursiones para llevar a cabo una de sus grandes pasiones: el deporte extremo. Por eso, en cada aniversario de boda, se escapaban al río Orinoco para cruzarlo a nado junto a otros cientos de participantes. Pero, dejando de lado este ritual anual, su mayor pasión son sus hijos, Manuela (6) y Leopoldo Santiago (2). Los pequeños al principio no entendían por qué su padre tenía que entrar en prisión y Lilian les explicó que su padre "es un héroe" y que "están en la cárcel porque algunos poderosos le tienen miedo". Ante esto, la hija mayor contestó una vez: "ya entiendo mami, Maduro tiene miedo de que papi le gana y por eso le encierra".

Lilian y Leopoldo en el bautizo de su hijo pequeño, hace dos años.

Lilian, la aventurera

Tintori se hizo conocida en su país en 2001, cuando participó en Robinson, la gran aventura, un reality show equivalente a Supervivientes en España, donde tuvo que convivir con otros concursantes en una isla desierta. A Lilian no le costó sobrevivir en mitad de la nada porque desde bien joven amaba los deportes extremos y destacó en el buceo para pescar y conseguir alimento, así como en las pruebas más duras.

Lilian en un fotograma del concurso 'Robinson: la gran aventura' donde destacó por su liderazgo.

Es una experta en kitesurf, kárate y triatlón. Aunque desde que es madre los ha abandonado, por el riesgo que suponen, y se ha centrado en el atletismo. El deporte es de hecho una de las piezas fundamentales que les unió a Leopoldo y ella como pareja, y les ofrece una visión que les ayuda a seguir adelante con su lucha política, "Si pierdes, aprendes de los errores, y te enseña que por más difícil que parezca la meta siempre es alcanzable".

Lilian es campeona de Kitesurf, deporte que practica desde pequeña. Instagram

Fruto del exilio político

La esposa de Leopoldo López nació en una familia humilde. Su madre es venezolana, pero su padre es argentino de nacimiento y tuvo que huir de Buenos Aires debido a la dictadura de Jorge Rafael Videla tras el golpe de Estado del año 1976. Un hecho que marcó al clan y a la propia Lilian.

Tintori se educó bajo la religión católica y con fuerte implicación en los valores de solidaridad y ayuda al prójimo. Consciente de la importancia de recibir una buena educación,  se licenció en Educación Preescolar en la Universidad Católica Andrés Bello de Venezuela. Después, viendo el panorama social que se estaba construyendo en su país, decidió estudiar Comunicación Política en la Universidad Central, titulación que le ha servido para llevar a cabo sus innumerables reivindicaciones en los últimos años.

Tintori ha creado una empresa centrada en la vida sana, 'Pura Energía'. Redes Sociales

En el terreno laboral, también hubo un tiempo en el que ejerció de presentadora de televisión en Caracas, locutora de radio o animadora de programas, unas oportunidades que tuvo que aceptar obligatoriamente ya que apenas recibía otras ofertas debido a su condición de esposa de López y su reciente maternidad, pero nunca vio tal situación como algo negativo, "mi vida al lado de Leopoldo ha estado dedicada al servicio, a los sueños, a un país, labor que me encanta".

Una líder 'rebelde'

El verano pasado la prestigiosa publicación Vanity Fair hacía un ranking con los líderes más rebeldes del mundo. En esa lista aparecía Lilian Tintori junto a otros nombres como el de Donald Trump (70), actual presidente electo de Estados Unidos; Alexis Tsipras (42), primer ministro de Grecia; o Pablo Iglesias (38), secretario general de Podemos en España.

Felipe González y Lilian Tintori se han visto regularmente en los últimos dos años.

Esa rebeldía de Tintori hace referencia al poder político, social y mediático que ha tomado en solo un par de años gracias a la causa que le prometió a su marido. Desde que Leopoldo permanece en la sombra, Lilian ha sabido alzar la voz hasta el punto de que ha sido escuchado por los más altos mandatarios del mundo. En febrero del pasado año la propia Casa Blanca abría las puertas a la activista venezolana para mantener una charla con el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden (74), en la que le puso al día de la realidad que vive su país.

También son conocidos sus encuentros con los ex presidentes españoles Felipe González (74) y José María Aznar (63) durante este año, al igual que su efusivo abrazo con Albert Rivera (37) nada más aterrizar en el aeropuerto de Caracas en mayo de 2016. Hace unos días, Lilian se reunió con el nuevo ministro de Asuntos Exteriores español Alfonso Dastis (61), en lo que sería para éste su estreno en la agenda latinoamericana en la que mostró su apoyo a labor de la opositora venezolana. Además, este mismo verano, Tintori participó en el foro del periódico La Razón en el que tuvo la oportunidad de reunirse con Mario Vargas Llosa (80), Cristina Cifuentes (52) y Pedro Sánchez (44).

De izquierda a derecha, Pedro Sánchez, Lilian Tintori, Mario Vargas Llosa y Cristina Cifuentes. GTRES

La mujer de López tampoco descuida las relaciones con el entorno hispanoamericano y por ello, se ha reunido con diversos líderes del continente sur que sirvan de impulso para acallar las políticas del chavismo. Uno de los últimos que a los que ha visitado ha sido al presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski (78), en octubre de este año.

Pero, sin duda, la cita más especial para Lilian fue la del 14 de octubre de 2015 en el Vaticano. Allí la recibió el Papa Francisco (79), a quien Tintori rogó que "no bendijera la dictadura de Maduro". En aquel entonces, la activista de Voluntad Popular le contó al sumo pontífice los problemas que vive Venezuela, una situación que continúa a día de hoy y que conversó de nuevo en la sede eclesiástica con el Secretario de Estado del Vaticano, Monseñor Pietro Parolin, hace solo unos días.

Lilian junto al Papa Francisco en 2014.