Lidia Torrent (29 años) y Jaime Astrain (35) están viviendo el momento más dulce de sus vidas. El nacimiento de su primera hija, Elsa, en noviembre de 2022, convirtió el presente año en el más especial de todos. No sólo sellaban una relación duradera que se dio a conocer a mediados de 2019, también emprendían una nueva etapa como familia. 

Ella, más allá de su parcela personal y familiar, e incluso de su trayectoria profesional, es toda una influencer y prescriptora. Lo demuestra siempre que tiene ocasión en su red social Instagram, donde atesora 323.000 seguidores.

En los últimos días, Torrent ha sumado un nuevo compromiso publicitario: se ha convertido en la imagen de la marca premium de cuidado capilar, Kerasilk. En lo que respecta a la moda, en una de sus últimas publicaciones la hija de Elsa Anka ha eclipsado con un impresionante vestido de Elisabetta Franchi. 

[El vestido bicolor de Mariló Montero que te realza la figura y tiene escote efecto envolvente]

"Se avecina una semana bonita", ha posteado la que fue un rostro veterano en el espacio First Dates, de Cuatro. La imagen está tomada en lo que parece un hotel, durante una sesión de fotos. 

Lidia Torrent luce un diseño de punto asimétrico. Cuesta 292 euros. "Vestido de punto en modal con cuello caído que deja el hombro al descubierto y mangas largas. La cintura es fruncida y la falda presenta una abertura lateral", se puede leer en la página web de la firma. 

Está disponible en diferentes tallas y colores. Su fabricación se divide en modal y elastano.  

Sobre Elisabetta Franchi

Elisabetta Franchi reescribió las reglas del prêt-à-porter mezclando elegancia y pragmatismo con seducción e inclusión. Esta es la historia de la diseñadora y emprendedora Elisabetta Franchi. Una historia virtuosa, totalmente italiana, que trata sobre estilo y creatividad, centrada en el poder de las mujeres y en los compromisos medioambientales y sociales.

Una historia que va mucho más allá de la dinámica del mercado para transmitir un mensaje potente a través de la pasión, el gusto por los nuevos desafíos y el orgullo de Elisabetta Franchi.