Rocío Crusset (28 años) ha heredado la elegancia y el buen gusto de su madre, Mariló Montero (57). Sin embargo, ha conseguido un estilo propio marcado por la sencillez, en el que reinan las piezas básicas y las prendas con estampados delicados y originales. Así se mostró este pasado domingo en sus stories de Instagram, combinando una camisa básica en tonos claros con un llamativo pantalón que se convirtió en la prenda estrella del outfit. 

La pieza, en concreto, es el 'pantalón Tamarillo' de Himba Collection, firma de los influencers María García de Jaime (27) y Tomás Páramo (27), cuyos diseños reflejan alegría. La propia Rocío Crusset, de hecho, agradeció a la joven empresaria por su look. "Gracias, bella", escribió. 

La prenda en cuestión pertenece al último lanzamiento de la marca, 'Tiles Collection', que rinde homenaje a los colores y las formas de África. En cuanto a su diseño, reúne todas las tendencias. Es un pantalón de talle alto y ligeramente acampanado que estiliza la figura al máximo. Tiene bolsillos en ambos lados y cierre con botón. Destaca, sobre todo, su estampado geométrico en tonos verdes y burdeos sobre una base en tono menta que sigue esa línea setentera que está en todas las tiendas de ropa desde hace varios meses. 

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Rocío Crusset con un pantalón estilo setentero. Instagram

El pantalón tiene un precio de 129,95 euros y ha sido confeccionado desde la talla XS hasta la XL. Sin embargo, ya se ha agotado en sus dos tamaños más pequeños. Un récord en ventas que confirma su éxito en la próxima temporada. 

La firma ha utilizado el mismo print en su chaleco 'Mangostino' y en la camisa 'Pequi', para aquellos que quieran lucir un total look. Sin embargo, todas las piezas se venden por separado para confeccionar otro tipo de estilismos, tal y como hizo Rocío Crusset. 

La joven diseñadora completó el 'pantalón Tamarillo' con una camisa básica y un abrigo largo en color terracota para aquellos momentos de frío. El toque final se lo dio con sus exclusivos accesorios: varios anillos y una serie de pulseras. Esta vez prescindió de pendientes y collares. Por el corte de la imagen, no se pudo advertir el calzado elegido. Sin embargo, el panralón admite tanto zapatillas, como botines, sandalias o tacones, según el outfit que se desee conseguir. 

Rocío Crusset, además, llevó sus gafas de vista y su melena suelta y al natural, con un ligero toque messy que acentuaron su estilo retro.