Exigencias del guion. No es extraño ver a actores y actrices que tienen que cambiar notablemente su fisonomía para encarnar a un determinado personaje en el cine. Tom Hanks (66 años) no es ajeno a esta dinámica, tal y como quedó patente en citas de la talla de Philadelphia y especialmente Náufrago.

Próximamente, el actor norteamericano traerá a la cartelera española uno de esos largometrajes que se convierten en una fenomenal excusa para asistir al cine en estas vacaciones navideñas. El peor vecino del mundo es una comedia dramática que no ha obligado a Hanks a variar su físico, aunque ese factor no lo tuvo en cuenta Pablo Motos (57) durante la visita del célebre intérprete esta semana a El Hormiguero.

"¿Cómo haces para estar tan fit?", le espetó el presentador a su invitado. Ante una pregunta tan comprometida, Tom Hanks se sinceró: "Lo voy a reconocer. Según he ido envejeciendo, toda la comida basura que comí de pequeño me ha generado una diabetes de tipo 2", confesó antes de matizar que "ahora debo tener cuidado con lo que como y mantener el ritmo, la línea y el tránsito, digamos, de todo el templo del cuerpo... Que es como el templo de Dios al mismo tiempo".

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Tom Hanks durante su visita a 'El Hormiguero'. Gtres

Enfermedad común

Aunque el misterio se había resuelto, Pablo Motos decidió no dar por cerrado el tema, comentando que "bueno, oye, te sienta muy bien". Obviamente la frase dio pie a numerosas críticas en redes sociales, aunque hoy no nos detendremos en esa polémica sino en la enfermedad del actor.

La Federación Española de Diabetes (FEDE) los define como "una enfermedad crónica que actúa de forma progresiva y que constituye el tipo más común de diabetes". Tal es la incidencia de la diabetes tipo 2 que se estima que es diez veces más frecuente que la de tipo 1.

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El actor está más delgado a causa de la diabetes que sufre. Gtres

En este sentido, el caso de Tom Hanks es paradigmático. La diabetes tipo 2 tiene una especial prevalencia en la población mayor de 45 años, siendo más probable su diagnóstico a medida que el paciente cumple años. Pero ¿cuál es el origen de esta enfermedad? Los especialistas apuntan como causa principal a la obesidad, producto de una mala alimentación y escasa actividad física. El propio actor reconocía que el punto de partida estaba en "toda la comida basura" que ingirió de pequeño.

Además de la obesidad, ya mencionada, los otros síntomas más habituales de este tipo de diabetes tienen que ver con antecedentes familiares, tensión arterial elevada, alteraciones de la glucosa en sangre y unos niveles de colesterol por encima de lo recomendable (especialmente en lo que se refiere a los triglicéridos).

Como en muchas enfermedades, lo mejor es apelar a la prevención, algo que pasa, ineludiblemente, por llevar una alimentación equilibrada, evitando productos procesados y, sobre todo, reducir en la medida de lo posible la vida sedentaria.

Pese a todo, si el paciente es diagnosticado con diabetes tipo 2, los tratamientos suelen basarse en tres pilares principales. El primero tiene que ver con la dieta, estableciendo un plan de alimentación que ayude a reducir la obesidad. De forma paralela se aconseja incrementar la actividad física, ejerciéndola de forma regular. Por último, se puede optar por un tratamiento farmacológico con productos que estimulen la secreción de insulina.