Es la primera sorpresa que ha deparado la final del Mundial del fútbol femenino en Australia y no tiene que ver con las jugadoras, sino con una inesperada aparición de la Reina (50 años) y la infanta Sofía (16) ante las cámaras. Faltaban unos minutos para que diera comienzo el partido y los nervios estaban a flor de piel, pero ambas quisieron atender a un equipo de la televisión pública desplazado para cubrir el evento.

Era la primera vez que la hija menor de los Reyes era entrevistada en directo, pese a que ha hablado en público en algún acto institucional, pero se la vio natural y con mucho desparpajo.

Vestida con una chaqueta en color crudo, pantalones oscuros y una llamativa bufanda roja, sin duda en señal de apoyo a las jugadoras españolas, comentaba: "La verdad es que estoy deseando que empiece el partido y sobre todo ir después al vestuario a felicitarlas pase lo que pase".

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Letizia y Sofía, minutos antes de empezar el partido. Casa Real

Por supuesto, la primera en tomar la palabra había sido la esposa de Felipe VI (55) que restaba importancia al hecho de haber tenido que recorrer miles de kilómetros en un larguísimo viaje en el que tuvieron que hacer escala en Abu Dabi, sin visita al Emérito de por medio. Lo importante es apoyar a las futbolistas españolas en un día histórico para ellas. Además, el fútbol es una de las grandes pasiones de Sofía y el hecho de que sea un encuentro femenino marca un punto importante en la agenda real.

"Es una alegría y es emocionante estar hoy aquí para arropar y para acompañar a las jugadoras y a todo el cuerpo técnico en una final que está haciendo vibrar a toda España. Yo creo que de nuestro lado están esa capacidad para superar obstáculos, el trabajo, el esfuerzo, las ganas de ganar y ojalá que también la suerte nos acompañe esta noche. Pero con independencia de lo que suceda, ellas ya son unas campeonas", comentó la Reina, también vestida de rojo.

Con todas las esperanzas puestas en la victoria, tras hablar con la prensa ocuparon su palco en el Accor Stadium de la ciudad australiana. La presencia de la Reina y la Infanta en el vestuario del equipo es segura."Ojalá sea para disfrutarlo, para celebrarlo y para felicitarlas, admirarlas y darles las gracias", decía Letizia.