Un día después de que se conociera que el duque de Edimburgo había fallecido, desde la casa real británica se ha publicado un mensaje en su cuenta de Twitter en el que se pueden leer unas palabras de la reina Isabel II (94 años). Unas frases que le dedicó en 1997, cuando celebraron sus bodas de oro, y que ahora rescata en esta despedida a través de las redes sociales oficiales de la corona.

Junto a una imagen realizada por la prestigiosa fotógrafa Annie Leibovitz (71) en 2016, se puede leer la más que significativa definición que la reina inglesa realizó en su día de su marido: "Él ha sido, sencillamente, mi fortaleza y mi permanencia todos estos años. Y yo, y toda su familia, y este y muchos otros países, le debemos una deuda mayor de la que jamás reclamaría, o que nunca sabremos".

Desde esa misma cuenta de Twitter, se ha recordado cómo, cuando Isabel II fue coronada en la Abadía de Westminster, el 2 de junio de 1953, Felipe de Edimburgo juró ser su persona de confianza. Una tarea que desempeñó de manera leal durante los años en los que representó a la corona en diversos actos oficiales. Desde ese momento, en el que su mujer se convertía en reina hasta su jubilación y retirada de la vida pública, en 2017. Durante esos 64 años, pronunció más 5.000 discursos, hizo 637 viajes oficiales al extranjero y asistió a más de 22.000 actos. El último, un acto militar en el palacio de Buckingham, la que fue su residencia hasta que hace poco más de un año, cuando comenzó la primera gran ola de la pandemia, se retiró a Windsor al lado de su esposa. Allí fallecía este 9 de abril.

La entereza de la reina

La monarca permanecerá de luto durante ocho días, tal y como se ha informado desde el Reino Unido. El funeral está previsto que se celebre el próximo sábado 17 de abril, si bien aún no hay confirmación oficial. Sí se sabe que, a pesar de tener derecho a un funeral de estado, tanto las circunstancias excepcionales marcadas por la pandemia como el expreso deseo de Felipe de Edimburgo de tener una despedida menos ostentosa, provocarán que sea una ceremonia militar y más sencilla. También que sus deseos pasaban por ser enterrado en los jardines de Frogmore, cerca del Castillo de Windsor.

Isabel II permanece dentro de ese castillo. Hasta allí se han desplazado sus hijos para ser su apoyo en este complicado momento, tras perder al que ha sido el hombre que ha tenido al lado durante los últimos 73 años. El príncipe Carlos (72), heredero al trono, se desplazaba hasta allí en la misma tarde de la defunción, recorriendo la distancia que separa su residencia, Highgrove House, en Gloucestershire, de Windsor. Los príncipes Andrés (61) y Eduardo (57), también acudían para arropar a su madre.

El príncipe Eduardo y Sofía de Wessex a su salida de casa rumbo a Windsor. Gtres.

Este último, además, regresaba a primera hora de este sábado, 10 de abril, junto a su esposa, Sofía de Wessex (56). Era sobre las 10 de la mañana, según recoge el diario británico The Mirror, cuando el matrimonio accedía a Windsor. A su salida, su nuera se deshacía en elogios hacia la entereza con la que Isabel II está afrontando estos primeros instantes del duelo. "La reina ha estado increíble", eran sus palabras a la prensa, con lágrimas en los ojos.

[Más información: Muere Felipe de Edimburgo, el marido de la reina Isabel II que renunció a sus raíces por amor]

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