Un día feliz y un momento para recordar. No solo para la reina Sofía sino para la historia de España. Este viernes 2 de noviembre, la emérita ha celebrado su 80 cumpleaños con dos actos: uno íntimo y otro oficial. El primero de los dos eventos, el privado, ha tenido lugar en el Palacio de la Zarzuela con un almuerzo al que han acudido sus tres hijos, sus ocho nietos y sus amigos más íntimos. 

Ha sido precisamente al borde de las escalinatas del Palacio de la Zarzuela donde ha tenido lugar una foto histórica. Una imagen que recoge el pasado, el presente y el futuro de la monarquía con la Familia Real al completo incluyendo, por primera vez en casi ocho años, a la infanta Cristina (53) con su hermano, el rey Felipe (50) y su cuñada, la reina Letizia (46). 

Marcando las distancias una vez más -pese a los deseos de su progenitora-, el rey ha posado con su esposa a la derecha y su madre a la izquierda. Arropando a su hermana, de nuevo, la infanta Elena (54), la primogénita de los eméritos, que ha posado con Cristina a su lado y su hijo mayor, Felipe Juan Froilán (20), al otro. 

Sin lugar a dudas, se trata de una jornada muy especial para la madre del rey Felipe en la que ha conseguido reunir a sus tres hijos después de años distanciados física y emocionalmente. La implicación y posterior condena de prisión de Iñaki Urdangarin (50) por el caso Nóos separó definitivamente a la infanta Cristina de su hermano, el rey de España, y de su cuñada, Letizia. Los monarcas han evitado coincidir con el matrimonio Urdangarin y Borbón en todo momento desde que en diciembre de 2011 se señalase a Iñaki y en 2013 a Cristina como presuntos implicados en la trama de corrupción que en estos días tiene entre rejas al yerno del rey emérito. 

El último encuentro de Letizia y Cristina

Un tiempo de hielo provocado en primera instancia por el rey Felipe VI y avivado por la reina Letizia, interesados en restaurar la monarquía y desvincularla por completo de cualquier situación que perjudique su imagen y la de la Corona. Lo cierto es que la Familia Real al completo no se reunía desde el pasado 3 de abril, momento en el que todos, incluyendo a la infanta Cristina recién llegada de Ginebra, se desplazaban hasta el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial para asistir a la misa en memoria por el 25 aniversario del fallecimiento de Juan de Borbón y Battenberg, conde de Barcelona y padre de Juan Carlos I.

'La familia de los funerales', los llegaron a tildar en determinados medios de comunicación, pues precisamente sus encuentros tenían lugar de acto fúnebre en acto fúnebre. El anterior al de Juan de Borbón data del mes de mayo de 2017, cuando falleció Alicia de Borbón y Parma, tía del emérito. Un momento de tensión y otra imagen para la memoria colectiva protagonizada por las miradas de 'reojo' de Cristina y Elena ante la llegada y la actitud de Letizia y Felipe, que sacrificó una vez más su corazón de hermano para actuar como rey.

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