La planta de menta es una de las aromáticas más populares, sobre todo por sus distintos usos en la cocina así como en la elaboración de infusiones y otras bebidas. Por ello, son muchos los que deciden plantar menta en casa. Además, su particular olor contribuirá a aromatizar tu hogar.

Y por si fuera poco, los beneficios que reporta esta planta para la salud son tantos que por eso hemos decidido mostrarte cómo cuidar planta de menta. Por ejemplo, este remedio natural es muy eficaz para tratar diversas dolencias. ¡Descubre cómo cuidar la planta de menta: cuidados y consejos! 

Consejos para cuidar planta de menta

1. Cuándo sembrar la planta de menta

Para cultivar menta, lo primero que debes tener en cuenta es que esta planta requiere temperaturas de entre 13 y 15 °C en la noche y entre 18 y 21°C durante el día. También debes considerar la estación del año para su siembra, ya que en primavera y verano se debe colocar hacia el este.

En cambio, en otoño e invierno mejor orientar la planta de menta hacia el sur u oeste. En cualquier caso, la época adecuada para sembrarla es en primavera u otoño, y debes hacerlo en un lugar donde reciba el sol por la mañana y tenga sombra durante la tarde.

2. Qué tierra utilizar

Si piensas sembrar directamente la planta de menta en el suelo, hazlo en un área húmeda de tu jardín y con un pH entre 6.0 y 7.0. Antes de proceder al cultivo, retira las malas hierbas para garantizar que tu planta de menta recibe la cantidad necesaria de nutrientes y prevenir así enfermedades.

3. Cómo cultivar menta en maceta

El cultivo de la menta requiere de espacio suficiente para crecer bien, de manera que tendrás que otorgarle a tu planta inicial la amplitud que necesita, pues nos proveerá de esquejes y/o semillas. Utiliza una maceta grande con agujeros en la base para drenar el exceso de agua y pon un plato pequeño debajo para ayudar a que el agua sobrante se absorba de nuevo.

4. Cómo sembrar menta en el jardín

Quizás el mayor problema a la hora de cuidar planta de menta en el jardín es su crecimiento desmedido. Para controlarlo, puedes colocar un recipiente en la zona donde vayas a sembrar la planta de menta enterrado en la tierra. Esto contendrá el crecimiento, pero revisa el recipiente de forma periódica para evitar que la planta crezca sin control.

Humedece el terreno antes de sembrar las semillas o los esquejes para facilitar su crecimiento. Esparce también una ligera capa de humus y pon cada esqueje o semilla con una separación de 15 a 30 cm. Si utilizas semillas, introdúcelas como máximo a 3 cm de profundidad, pero si se trata de un esqueje, la profundidad debe ser de unos 5 cm.

5. Uso de esquejes 

Como hemos dicho, puedes sembrar una planta de menta tanto utilizando esquejes como semillas. Los esquejes se obtienen cortando algunas de las extremidades de otra planta sana con una longitud de entre 12 y 15 cm. Retira después las hojas inferiores del esqueje y pon el tallo en un vaso con agua. Colócalo en una ventana donde reciba el sol de 4 a 6 horas al día.

Cuando hayan crecido las raíces y tengan una longitud apropiada, será el momento de ponerla en la tierra. Y recuerda añadir agua al recipiente cuando lo consideres necesario durante este tiempo. Si vas a sembrar tu planta de menta en una maceta, utiliza una rama por unidad. En cambio, si la maceta es grande, puedes utilizar varias plantas manteniendo la distancia mencionada.

6. Cuidados de un planta de menta en casa

Cuidar planta de menta no es para nada complicado, pero tendrás que administrarle un poco de fertilizante cada cierto tiempo. También debes mantener el suelo húmedo, para lo cual puedes aplicar un mantillo alrededor de la planta. Así también evitarás que la planta se propague en exceso.

Otro cuidado a tener en cuenta es que el cultivo de la planta de menta se debe levantar por completo cada 3 o 4 años para proceder a una nueva plantación. De este modo, obtendrás hojas de mejor sabor y aroma.

Si tu planta de menta está en una maceta, te aconsejamos que la gires cada tres o cuatro días para que crezca de forma uniforme, ya que suele orientarse buscando el sol. No olvides agregarle una capa de abono orgánico o de compost después de unos meses, y el mantillo también es un buen remedio durante los meses fríos.

7. Riego del cultivo

Para cuidar planta de menta, debes proporcionarle un riego continuo. No obstante, tampoco es necesario que la riegues todos los días, pero asegúrate de que la tierra está siempre húmeda, que no encharcada. Si percibes que la planta se marchita, puede deberse a estos factores: la falta de luz solar o el exceso o escasez de agua.

8. Cosecha

En los cuidados de una planta de menta en casa también entra la recolección, la cual debe hacerse justo antes de que florezca para que las hojas tengan más sabor y un olor intenso. Para ello, cosecha la planta de menta justo por encima de la primera o segunda agrupación de hojas.

Por último, durante la cosecha también se recomienda retirar todas las hojas que estén amarillentas para promover un crecimiento óptimo y más tupido de tu planta. Puedes realizar hasta tres cosechas por temporada.

Como curiosidad, si vas a sembrar esta planta en tu huerto te interesará saber que puede crecer junto a la coliflor y el brócoli, pero evita la siembra de una planta de menta junto a la hierbabuena o el perejil. Como has podido comprobar, cuidar planta de menta es muy sencillo, ¿te animas a intentarlo?

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