P. Fava
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La Plataforma RASFF, la herramienta del Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos de la Unión Europea mediante la que las agencias de seguridad alimentaria de Europa comparten las alertas, ha informado de la detección de niveles de mercurio por encima de los límites tolerables para el consumo en uno de los pescados más consumidos de España. El producto en concreto son 'filetes de atún congelado'.

Según la alerta difundida a nivel europeo, la presencia de este contaminante neurotóxico en el pescado fue detectada en un "control oficial en el mercado" en Italia. Tras calificarse el riesgo como "grave", las autoridades italianas han informado a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) de España para que tome medidas para evitar que el pescado afectado llegue a los consumidores.

AESAN informa de la retirada y destrucción de los lotes afectados en respuesta a la alerta europea. Según RASFF, se han detectado 2,8 mg de mercurio por kilo de pescado, cuando el límite para este metal pesado en la carne del pez destinado para el consumo humano no puede exceder 1 mg. Esto se debe a que el metilmercurio está presente inevitablemente en los peces de agua salada y dulce, tanto de forma natural como a causa de la acción humana en su ambiente.

El consumo de pescado es la primera fuente de contaminación por mercurio (Hg) entre los consumidores, lo que obliga a tomar determinadas precauciones con este alimento. En su forma de metilmercurio (MeHg), el metal se considera un potente neurotóxico que puede causar trastornos en el sistema nervioso, especialmente cuando se encuentra en formación. La exposición al mercurio puede afectar a la maduración y el desarrollo neurológico de niños pequeños y muy especialmente de gestantes.

La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), dependiente de los ministerios de Consumo, Sanidad y Agricultura, Pesca y Alimentación, establece que el atún, al igual que el resto de pescados con altos niveles de mercurio, debe reducirse a un consumo máximo de una ración a la semana a partir de los 10 años.

A partir de los 14, así como en adolescentes y adultos, no establece restricciones por especies pero insta a alternar entre "azules" y "blancos" para las "tres o cuatro" raciones a la semana que recomienda consumir.

Un estudio publicado en la Revista Española de Salud Pública llevado a cabo por investigadores de la Comunidad Valenciana explicaba en 2023 que "España está considerada una región con un consumo elevado de pescado, y, por tanto, con una probabilidad apreciable de exposición elevada al Hg".

Los resultados indicaban que, si bien se aprecia un descenso interanual en la concentración de metal, el que más riesgo presentaba era el grupo del pez espada y el emperador, con 0,80 mg/kg de mercurio. El grupo del atún y bonito frescos fue el segundo en concentración, con 0,48 mg/kg. El atún en lata fue el tercero, con 0,28 mg/kg.