El cáncer de colon es uno de los más frecuentes a nivel mundial, pero su impacto en personas jóvenes está aumentando de manera muy llamativa. A menudo, esta enfermedad se asocia con síntomas bien documentados como cambios en los hábitos intestinales o la presencia de sangre en las heces. No obstante, algunos pacientes pueden experimentar signos poco usuales que retrasan el diagnóstico y, por ende, las posibilidades de un tratamiento efectivo.
Es el caso de Toby Bevans, un británico de 42 años cuya enfermedad se manifestó de manera inesperada. Sin presentar las señales clásicas de este cáncer, al no asociarse inmediatamente con problemas digestivos, la enfermedad pasó desapercibida hasta que alcanzó un estadio avanzado. Cuando recibió el diagnóstico en enero de 2024, el cáncer ya se había extendido a su hígado y sus huesos.
Su esposa, Ali Bevans, ha querido compartir su historia, de la que se ha hecho eco el diario británico Daily Mail, para advertir sobre estos síntomas atípicos que pueden retrasar un diagnóstico temprano. "El diagnóstico de Toby llegó con muy pocos síntomas y ninguno de los signos tradicionales del cáncer de colon. Fue un gran impacto", explica. "Fue literalmente como un tren bala y el tren bala se estrelló".
Síntomas no convencionales: más allá de los signos digestivos
El cáncer de colon suele identificarse con cambios en el tránsito intestinal, sangre en las heces o dolor abdominal, pero cada vez más casos presentan manifestaciones poco comunes. En el caso de Toby Bevans, su esposa explicó que "los únicos síntomas que tuvo antes del diagnóstico fueron fatiga, dolor de espalda y luego dolor en el pecho".
Por ese motivo, Bevans insiste en la importancia de prestar atención a estos signos y acudir al médico ante cualquier síntoma persistente. "Nadie sabe qué le espera en el futuro, pero podemos hacer lo posible por vivir nuestra vida hoy", afirma.Y para llamar la atención sobre ello, se ha convertido en una verdadera activista en la lucha contra el cáncer.
Tras la muerte de su esposo en junio de 2024, decidió canalizar su dolor en una causa: alertar a la población sobre la creciente incidencia de cáncer de colon en menores de 50 años. Para ello, ha recaudado más de 85.000 libras esterlinas -alrededor de 100.000 euros- para la organización Bowel Cancer UK -especializada en el cáncer de colón-.
También participará en el Maratón de Londres 2025 para seguir concienciando sobre la enfermedad.Este reto deportivo se ha convertido en un símbolo de su lucha. "El maratón me ha dado algo positivo en lo que concentrarme", añade. Pero no solo eso, también espera alcanzar su nuevo objetivo de recaudación de 100.000 libras esterlinas y, al cruzar la meta junto a su equipo, rendir homenaje a su esposo.
Una tendencia alarmante
El cáncer de colon ha sido históricamente una enfermedad asociada a adultos mayores, con una edad media de diagnóstico en torno a los 70 años. Sin embargo, las tendencias recientes están desafiando esta percepción. En países como España, donde cada año se detectan más de 40.000 nuevos casos, los datos muestran un aumento preocupante en personas menores de 50 años.
Aunque las razones detrás de este fenómeno no están completamente claras, los expertos apuntan a varios factores de riesgo. La alimentación y el estilo de vida modernos han sido señalados como posibles detonantes, con especial atención a la influencia de los alimentos ultraprocesados, el sedentarismo y la exposición a sustancias químicas. Algunos estudios recientes sugieren que la microbiota intestinal también podría desempeñar un papel clave en la prevención.
Otra tendencia es la de presentar síntomas diferentes a los tradicionalmente asociados a la enfermedad. Hasta hace poco, el sangrado rectal se consideraba el principal indicio de un cáncer de colon, pero en pacientes jóvenes se están observando signos más inespecíficos, como la fatiga, el dolor lumbar o molestias abdominales persistentes.
A pesar de estas cifras alarmantes, la prevención y la detección precoz siguen siendo las mejores herramientas contra el cáncer de colon. Según la Clínica Universidad de Navarra, si se detecta a tiempo, esta enfermedad es curable en más del 90% de los casos. Esto subraya la importancia de los programas de cribado y de acudir al médico ante cualquier síntoma persistente, incluso si no parece estar relacionado directamente con el sistema digestivo.