No se sabe su nombre ni la comunidad autónoma donde reside, pero se acaba de dar a conocer que una mujer que hasta hace apenas unos meses residía en Latinoamérica solicitó la interrupción voluntaria de su embarazo tras detectarse que el feto presentaba malformaciones cerebrales debidas al virus del Zika, del que la madre se había infectado en el primer trimestre de gestación. 

Por motivos de confidencialidad, se desconoce si esta mujer es española o extranjera. Pero, en cualquier caso, de haberse quedado en el continente americano sus posibilidades de abortar hubieran sido mucho menores. En la mayoría de los países de esta zona, la interrupción voluntaria del embarazo sólo está permitida en caso de violación de la madre, algo que ha generado mucha controversia en los últimos tiempos, tras el espectacular aumento de casos de microcefalia asociados al virus del Zika. 

Así es el virus del Zika.

El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (MSSI) ha actualizado la situación del virus del Zika en España, en su informe Evaluación Rápida del Riesgo de transmisión de enfermedad por el virus Zika en España. Es en esta sexta versión (PDF) donde aumenta a dos el número de embarazadas infectadas por el Zika en las que se han detectado malformaciones en el feto.

El primer caso ya se había hecho público y se sabe que fue en Cataluña. "En uno de los casos la mujer inició síntomas de la enfermedad durante un viaje a Latinoamérica en el primer trimestre del embarazo, el virus Zika fue posteriormente confirmado mediante PCR y en la semana 25 de gestación se observaron malformaciones cerebrales importantes en el feto", dice el informe de Sanidad.

El nuevo es ligeramente distinto porque la mujer residía en Latinoamérica, inició síntomas de la enfermedad durante el primer trimestre del embarazo y posteriormente viajó a España. "Se detectaron malformaciones cerebrales en el feto por ecografía el segundo trimestre y la madre solicitó la finalización voluntaria de la gestación. La presencia del virus fue detectada en el cordón umbilical y tejido cerebral del feto", se lee en el informe, que no deja claro si la mujer ya ha abortado o no, aunque la última frase parece indicar que dicho aborto ya se ha llevado a cabo.

Pero ¿podría darse el caso de que se tratara de una mujer latinoamericana que hubiera venido a España a abortar por no poder hacerlo en su país? Desde Médicos del Mundo confirman a EL ESPAÑOL que la exclusión sanitaria a los inmigrantes ilegales no incluye la atención al embarazo -es decir, una latinoamericana que viniera a España embarazada puede recibir atención médica durante su gestación- pero que, en la práctica, lo que no está incluido es la interrupción voluntaria del mismo.