El Arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello, con el Papa Francisco
Luis Argüello despide con "dolor y agradecimiento" al Papa: "Impulsó una transformación social y eclesial"
El presidente de la Conferencia Episcopal asegura que el nuevo Papa "dará alguna sorpresa" y continuará con la pauta de "cambio social y cultural".
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El arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, ha lamentado el fallecimiento del Papa Francisco y ha destacado de su pontificado que se caracterizó por el anuncio del evangelio a los más pobres, en la "cercanía de aquellos que viven el cambio de época en la exclusión, en la falta de reconocimiento de su dignidad".
Asegura que la iglesia mira "con lágrimas en los ojos, pero con alegría, agradecimiento y esperanza en el corazón" el fallecimiento del Papa Francisco, pero afirma que "sus textos y orientaciones ya forman parte del acervo magisterial de la Iglesia para siempre".
Argüello ha avanzado que estará como presidente de la Conferencia Episcopal en Roma para despedir al Papa, pero que aún no sabe cuándo viajará puesto que está esperando a tener conocimiento de las fechas de las exequias.
Recordaba la presencia durante la tarde de ayer del Papa Francisco en la Plaza de San Pedro para "anunciar con su gesto y débil voz" el anuncio central del acontecimiento cristiano: la victoria de Jesucristo sobre la muerte.
Una homilía que "no pudo llegar a leer" ya que, como recuerda el arzobispo de Valladolid, "todos éramos conscientes de su frágil estado de salud". Un día que para la Iglesia está marcado por "el dolor y la esperanza", un dolor que es "compatible con la alegría del corazón, por experimentar la misericordia de Dios".
Luis Argüello saludando al Papa Francisco
Un Papa que, afirma, "ha marcado esta época impulsando una gran transformación cultural, social y eclesial", en la que "el santo y seña de la vida de la Iglesia está el anuncio del Evangelio a los pobres". Un camino que está convencido de que continuará con el próximo obispo de Roma.
Argüello asegura que la mayoría de los cardenales han sido elegidos por el Papa Francisco, "con presencia de los lugares más remotos del mundo, fiel a su lógica de las periferias".
Y asegura que el nuevo Papa dará "alguna sorpresa" y continuará con la misión de "cambio social y cultural, que ha venido a la Iglesia para quedarse". Por ahora, Argüello prefiere "no especular" y afirma que el futuro obispo será el Papa "que la Iglesia precise".
De España, hay cuatro cardenales que participarán en el cónclave para elegir el nuevo máximo representante de la Iglesia Católica; con la premisa de que todos ellos deben ser menores de 80 años.
Uno es Antonio Cañizares, cardenal arzobispo emérito de Valencia, de 79 años, aunque Argüello duda de su presencia por "motivos de salud".
También forma parte el cardenal arzobispo de Barcelona, de 79 años, Juan José Omella. El cardenal arzobispo de Madrid, de 59 años, José Cobo. Y el cardenal arzobispo emérito de Madrid, de 79 años, Carlos Osoro.
Otros, como es el caso de Ángel Fernández Artime, tienen oficios en la Santa Sede. Es pro-prefecto del Dicasterio para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica desde 2025.
Argüello está a la espera de conocer cuándo serán las exequias que, al parecer, el Papa Francisco había previsto que "fueran más pronto" de lo habitual. Los cardenales han sido convocados a Roma el miércoles y, añade, que cuando conozca las fechas organizará su viaje.
En total, informa que se tardan unas dos o tres semanas en este proceso y que el Papa Francisco ha sido claro "en sus orientaciones, gestos, palabras y nombramientos" dejando ahí su "voluntad y decisión" para quien le preceda.
Ahora, es el Colegio Cardenalicio el que debe tomar la decisión, con mayoría, para que aparezca la fumata blanca en la Plaza de San Pedro y sea presentado el nuevo obispo de Roma.
