La ‘Estadística Continua de Población’ publicada por el INE esta semana ha dado un pequeño respiro a Castilla y León. La población residente en la Comunidad ha crecido en 2.205 personas, o lo que es lo mismo un 0,09%, durante el tercer trimestre del año, este pasado verano. De esta manera, ya somos 2.385.907, de los cuales 1.171.334 son hombres y 1.214.573 son mujeres. Es cierto que es la tercera comunidad donde menos ha crecido, pero “algo es algo”, que diría aquel. Si echamos la vista atrás, y se compara con hace un año, el resultado es que la Comunidad ha ganado 6.355 habitantes.

Ahora bien, estos datos de aumento tienen una protagonista clara: la llegada de población extranjera a Castilla y León. En estos tres meses, el anterior dato es de julio de 2023, la población nacional ha disminuido en 2.604 personas, pasando de 2.140.643 a 2.138.039 Mientras que la extranjera ha aumentado en 4.809 personas.

Es decir, que mientras el crecimiento natural de la población es negativo, es la llegada de inmigrantes la que está ocasionado el crecimiento poblacional. 

Con estos datos, la cifra total de personas que han nacido en el extranjero y ahora residen en Castilla y León es de 247.868 personas, un dato que significa la cifra más elevada de la serie histórica, según los datos del INE. Es un 10,4% de la población total. Y en contra partida, el número de residentes nacidos en el país también marca récord, pero en este caso a la baja. Ahora mismo hay 2.138.039 españoles viviendo en Castilla y León, la cifra más baja desde que se analizan los datos desde 2002.

En un año, desde octubre de 2022, se ha pasado de 227.538 extranjeros a 247.868, es decir, 4.809 censados más. Por su parte, los censados nacidos en España ha pasado en doce meses de 2.152.014 a los actuales de 2.138.039, es decir, 13.975 nacionales menos.

Ese 10,4% de población extranjera no es de los más altos a nivel nacional, donde la media es de 17,7%, todo lo contrario, Castilla y León está entre las tres comunidades con menos proporción de emigrantes entre su población. Así, Asturias tiene un 10% y Extremadura un 5,4%.

Los datos del INE también reflejan la procedencia de los países de estos extranjeros. Así, en estos tres meses de verano, han llegado a Castilla y León 1.570 nuevos residentes desde Colombia, de Marruecos han llegado 900 y de Venezuela, 730.

Por provincias

En Ávila actualmente, según datos del INE, hay 158.612 censados, 99 más en un año. Y lo hacen gracias a los extranjeros, que han pasado de 11.968 a 13.085, ya que los nacionales han disminuido en 1.216 personas.

Burgos cuenta con 358.841 personas, en un año han subido 2.172, y lo hacen también con la llegada de personas de fuera, que ya son 35.158 frente a los 323.683 nacionales, que han descendido en 590.

Por su parte, en la provincia de León hay 447.186 censados según el INE, que son menos que en un año. Aquí ni la llegada de extranjeros, que pasan de 22.859 a 24.291, ha servido para paliar el descenso de nacionales, que se reduce de 425.587 a 422.985.

Palencia ha logrado subir en doce meses 81 personas, ya son 157.782. Y lo hace con más extranjeros, son 9.356 (8.179 el pasado mes de octubre) y 148.426 nacionales.

La provincia de Salamanca ha ganado 201 personas en este tiempo, ahora son 327.288. Se han ganado 2.194 extranjeros (hay 20.516), mientras que se han perdido 1.993 nacionales (hay 306.722).

En Segovia son 155.850 censados, se ganan 1.649 en un año. Y lo hacen por los extranjeros, donde se ganan casi 2.000, pero se pierden unos 200 nacionales.

En la provincia de Soria hay 90.240 personas censadas, casi 1.00 más que hace un año. Se han perdido unas 200 nacionales, pero se ha ganado 1.100 extranjeras.

La provincia de Valladolid ha cambiado su tendencia y en el último año ha sumado casi 3.000 nuevos vecinos. Ha pasado de contar con 520.664 habitantes hace un año a los 523.828 actuales. La población extranjera de Valladolid creció en casi 3.500, mientras que la española descendió en 315.

Por último, la población de Zamora descendió en 498 personas durante el último año y se situó en 166.280 habitantes. Ni el aumento de personas extranjeras, que pasaron de 7.245 a 8.199 (+954), pudo frenar la sangría, ya que los nacionales se redujeron en 1.452, de 159.533 a 158.081.