Vanesa Manzano y Leo Apellániz llevaban 14 y 20 años trabajando en la tienda de ropa Massimo Dutti de Zamora capital. Una vida dedicada a la boutique de moda y de la noche a la mañana la empresa decretaba su cierre y todo se iba al traste. Pero esta pareja de compañeros siempre tuvieron un sueño en común sí ocurría un revés como este: abrir un bar.

Y quiso el destino que tras quedarse sin empleo, el bar de Cañizo (pueblo natal de la mujer de Leo) entrara en subasta y estos amigos apostaron por él en el mes de agosto, principios de septiembre. Meses y meses de duro trabajo, que con el "gran apoyo del Ayuntamiento y de los propios vecinos de Cañizo", han acabado por crear el bar 'Leyva'. Un establecimiento que aunará bar, vinacoteca, pinchos, comidas caseras, una pequeña parte de tienda de comestibles y hasta el despacho del pan. Todo para ir complementando los servicios que el pequeño pueblo ha ido perdiendo con los años. De ahí también la propia ilusión de los vecinos de Cañizo que, como cuenta Vanesa Manzano a Noticiascyl Zamora, "nos traían termos de café durante la reforma y nos han echado una mano siempre que han podido". 

Ayer mismo el 'Leyva' se ponía en marcha, con una inauguración que "ha sido todo un éxito" y la ilusión latente de que este proyecto embarcado en una situación más que complicada para la hostelería salga adelante de la mejor manera posible. Un ejemplo puro y duro de que es posible emprender en la llamada 'España Vaciada', porque estos dos amigos se han vuelto al pueblo y encima para traerles servicios que habían ido perdiendo.