¿Se imagina tener que vivir con poco más de 8.500 euros al año, o lo que es lo mismo, 716 euros al mes? En algunos municipios de Castilla y León no tienen que imaginarlo, sino que es una realidad, según revela el Atlas de Distribución de Renta de los Hogares que elabora anualmente el INE, y que se sirve de datos de la Agencia Tributaria. Es el caso de Moral de Sayago, en la provincia de Zamora, el municipio más pobre de Castilla y León, donde sus habitantes tienen una renta media de 8.592 euros anuales. En el otro extremo se sitúan los municipios de Renieblas, en Soria, que disfruta de una renta media de 20.405 euros; Castrillo del Val, en Burgos, con 19.842 euros por habitante; y a continuación varias localidades también sorianas: Duruelo, (18.737), Maderuelo (18.655) y Navas de Riofrío (18.562).

Y, en el conjunto de España, encabezan la lista Pozuelo de Alarcón, con 26.009 euros anuales, una privilegiada excepción que también se aplica a Matadepera (Barcelona), con 22.806 euros, y Boadilla del Monte (Madrid), con 22.224 euros, que encabezan el podio de la renta del país.

En Valladolid también hay un municipio que, a su pesar, encabeza el ránking provincial de los municipios más pobres. Se trata de Castroponce de Valderaduey, un pequeño municipio de la comarca de Tierra de Campos a 69 kilómetros y una hora de viaje desde la capital. Cada habitante dispone de una renta anual de 9.418 euros, un total de 784 euros al mes. Junto a Castroponce, conforman la lista de los cinco pueblos con menor renta de la provincia de Valladolid Villafranca de Duero, con 9.604 euros; La Unión de Campos (9.733); Carpio (9.805 euros) y Nava del Rey (9.923 euros).

A pesar de que en la actualidad cuenta con tan solo 139 habitantes, Castroponce tiene un pasado esplendoroso que se remonta a tiempos de los celtíberos y romanos. Hasta la primera mitad del siglo XII, Castroponce fue conocido como Castrodonín. El yacimiento prerromano que se sitúa en el cerro de la Fortaleza atestigua que existió un importante asentamiento en la Edad Media, gracias a la estratégica posición geográfica que ofrecía una defensa inexpugnable. Por eso tuvo castillo, hoy casi desaparecido, aunque perviven algunos vestigios.

Enclave defensivo del Reino de León

Además, durante la Alta Edad Media dicho castillo formaba parte de la línea defensiva del Reino de León frente a Castilla en plena línea fronteriza, hasta que el 1196 fue tomado por las tropas castellanas de Alfonso VIII. Ya en la Edad Moderna, Castroponce formó parte de la provincia de León, y con la reestructuración de provincias y al crearse las actuales en 1833 pasó a formar parte de Valladolid, y con ella de Castilla La Vieja. En 1961, tras una inundación por el desbordamiento del río Valderaduey, hubo de construirse el Pueblo Nuevo, motivo por el que en la actualidad Castroponce está conformado por dos pueblos, el viejo y el nuevo.

En la actualidad dispone de campo de fútbol, pabellón y pista polideportiva; centro cívico, consultor médico y telecentro.

Castroponce cuenta con una imponente iglesia de estilo barroco del siglo XVIII, la de Santa María, que es bien de interés cultural y está construida en ladrillo y adobe. En Navidad es célebre La Corderada, una fiesta popular en la que los vecinos llevan ofrendas al niño Jesús entonando canciones típicas tras la misa del gallo, y en su rica gastronomía destacan los pollos de corrales y los pichones, que pueden degustarse en el mesón que hay bajo el cerro.

Consulta la renta de cada municipio de Valladolid