Todo preparado para que el sábado 6 de mayo se reúnan las buenas gentes de La Empalizada, de Montemayor de Pililla, para viajar hacia tierras salmantinas. Concretamente a Guejuelo del Barro, una pequeña localidad en Tierras de Ledesma, justo al lado de Calzadilla del Campo, la finca de Ignacio López Chaves, donde el pasado año hicieron parada las gentes de esta modélica asociación.

Y en Guejuelo del Barro está la ganadería de Valrubio, de origen Vega-Villar. Allí retozarán los niños, y los mayores disfrutarán de la hospitalidad de los ganaderos: “Pepe Valrubio” y su hijo Carlos, que es quien se encarga actualmente de la ganadería que cuenta con dos hierros: Valrubio y Valdeflores, esta de procedencia Domecq.

El programa es el siguiente:

Salida del bus desde Montemayor y Valladolid en los puntos establecidos. Parada en el camino para tomar el café de rigor.

 Llegada a la finca y recibimiento por parte del ganadero. El almuerzo es algo que nunca falta, así que lo habrá y abundante.

Tras la reposición de fuerzas, girarán una visita a los cercados.

La comida, servida por el negocio de restauración que gestiona el que fuera banderillero, Guillermo Barbero, se realizará entre las encinas.

Ya por la tarde habrá tentadero a cargo del matador de toros salmantino Antonio Grande, más conocido por “El torero del Huebra” por haber nacido en San Muñoz, localidad bañada por el río charro. Grande tomó la alternativa el pasado año en Alba de Tormes de la mano de Morante de la Puebla y de testigo Daniel Luque.

Luego, tras el tentadero, habrá becerras para los más atrevidos, que haberlos haylos en la asociación. Y antes que anochezca la expedición saldrá camino de Pucela tras haber disfrutado de un día campero por tierras charras.

Raúl Redondo, uno de los fundadores de La Empaliada, nos comentaba que el año pasado hubo dos toros de esta ganadería por las calles de Montemayor durante el día grande de las fiestas. Uno de ellos, un toro jabonero, dio un buen juego. Que todo salga bien y a disfrutar.