El Recoletas Atlético Valladolid ha demostrado la importancia que para el club y el equipo tiene esta Copa del Rey con una muy seria puesta en escena para vencer anoche al Handbol Sant Quirze de División de Honor Plata, 23-32, y certificar su pase a la tercera ronda de la competición.

Después de una primera mitad bastante igualada, los pucelanos consiguieron romper el partido en la segunda parte gracias a la sensacional actuación de César Pérez en portería y las defensas abiertas que atenazaron al cuadro local. Los  azules remataron la buena faena con la calidad ofensiva de jugadores como Miguel Martínez, Basualdo y Jorge Serrano y además cumpliendo el objetivo de repartir minutos entre la plantilla disponible y ganar rodaje para avanzar en la puesta a punto.

El buen rendimiento de los porteros, Gerard Esparza, por parte del Sant Quirze y César Pérez del Atlético Valladolid, más los buenos minutos de ambas defensas hacían que el choque se mantuviera igualado en el inicio. Los locales presionando mucho la circulación de balón pucelana y logrando recuperaciones que transformaban al contraataque, se pusieron por delante 6-5, obligando al primer tiempo muerto del técnico David Pisonero y poniendo en serios aprietos al Recoletas a pesar de ser un equipo de inferior categoría.

Pero el Recoletas se desperezó y remontó, aunque no pudo tomar ventaja por las pérdidas en ataque, con lo que Estirado volvía a poner en ventaja a los locales, 10-9, en el minuto 21. Pisonero fue introduciendo rotaciones y recursos tácticos defensivos pero el cuadro catalán resistía. Sin embargo, los arreones finales del Atlético Valladolid dieron resultado y Jorge Serrano certificaba el primer parcial serio de los visitantes (0-3) con su tercer gol, llegando el intermedio con dos arriba para los vallisoletanos, 13-15.

Al comienzo de la segunda mitad la defensa con el avanzado Miguel Camino dio al Recoletas un rendimiento perfecto.Sant Quirze se quedó clavado en los 13 goles del descanso durante ocho minutos y el Recoletas logró cinco de ventaja, 13-18. Controlando el ritmo de juego, imponiendo su físico a pesar de las ausencias y con un inspirado César Pérez en portería, el equipo castellano impidió la reacción rival.

A pesar de que el conjunto local trató de no perderle la cara al choque, el Atlético Valladolid logró irse de siete 18-25 tras gol de Patrianova en el minuto 47, y ahí sentenció definitivamente la eliminatoria. Los visitantes pudieron además ir aumentando su diferencia favorable hasta los nueve de máxima, para ya no pasar apuros y lograr merecido billete a la tercera ronda de la Copa del Rey.