Una solución a la accesibilidad y un cambio medioambiental en la zona. Con esas dos premisas se ha presentado hoy, en el Ayuntamiento de Valladolid, el proyecto de elevadores mecánicos que permitirá una comunicación rápida entre Parquesol, Arturo Eyries y el Paseo de Zorrilla. Un proyecto con un presupuesto de licitación de siete millones de euros y que permitirá “dar una solución sostenible a los problemas de accesibilidad del barrio con mayor altitud de Valladolid”, tal y como ha explicado el alcalde, Óscar Puente.

En Parquesol residen más de 26.000 personas “siendo la mayoría potenciales usuarios” de los sistemas que se han previsto. Así, el proyecto salvará el desnivel de 30 metros con un ascensor inclinado, rampas y escaleras mecánicas a lo largo de un recorrido de 210 metros, con un desnivel de 30 metros y una pendiente del 30%.

Respecto al ascensor, tendrá una capacidad para 25 personas y hará el recorrido en aproximadamente dos minutos, dando un resultado, sumándose los tiempos de carga y descarga, de 250 personas a la hora.

Estos mecanismos forman parte, junto a los ascensores de San Isidro y la adjudicación de los elevadores de la zona norte de Parquesol, del Plan Integral de Movilidad sostenible del Ayuntamiento. Y no se quedará solo en eso, puesto que la apuesta es más ambiciosa al contar con un plan medioambiental para los aledaños.

Con ello, se pretende que no sea necesario el uso del vehículo particular eliminando la barrera física que existe actualmente. La idea, además, contempla la opción que los usuarios puedan disfrutar de uno de los espacios más singulares de Valladolid, “el Parque de los Almendros, que cuenta con la mayor concentración de esta especie arbórea en la ciudad”.

Una apuesta por el cuidado del Medio Ambiente

El proyecto se ubica entre ese parque, la calle Mariano de los Cobos y la Avenida de Salamanca junto a la intersección con la Avenida Medina del Campo. Gracias a la integración de los diferentes elementos mecánicos “permitirá mejorar la configuración actual del parque, con nuevos espacio s verdes y zonas ajardinadas”. Asimismo, se incorpora un elemento nuevo en el paisaje, el agua “unido a juegos de luces y de pantallas led” que harán de este parque “un nuevo punto de encuentro y zona a visitar por la integración de elementos innovadores con el entorno natural”.

Entre ellos se prevé una zona de espacio y relax en el entorno de una fuente en forma de V, en la que desde la parte inferior discurra una cascada de agua bañando las letras con luces y colores. Asimismo, habrá otra zona de cortina de agua, un anfiteatro y árboles metálicos. Todas las instalaciones contarán con sistemas de monitorización, control y videovigilancia.

En cuanto a las construcciones, el proyecto prevé “un ascensor inclinado con dos paradas extremas y pasarela de conexión, cuatro rampas y una escalera mecánicas”. Todas ellas se adjudicarán este miércoles, 1 de diciembre, en Junta de Gobierno a una UTE de empresas que encabeza Constructora San José que ha pujado la obra por un total de 5,5 millones de euros.

El inicio de la intervención será a principios de 2022 con un plazo de ejecución de doce meses más dos por lo que se prevé que sea una realidad en el inicio de 2023.