El secretario general del Partido Popular, Teodoro García Egea, ha señalado esta tarde que Castilla y León ha sido el epicentro del "intento de terremoto político" de Pedro Sánchez y que provocó una ola de cambio. Una "agresión" que produjo el Gobierno de España, en su opinión, a "dos Gobiernos estables de libertad" en Murcia y Castilla y León, convertida hoy en día en "ejemplo de los gobiernos de la libertad".

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Unas palabras pronunciadas este miércoles por García Egea en Valladolid tras la Junta Directiva del PP de Castilla y León junto al presidente del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, en la sede regional, y arropados por los presidentes provinciales. 

El secretario general del PP ha alabado la "gestión modélica" del Gobierno de Mañueco, que da "soluciones reales" a los problemas de los castellanos y leoneses, convencido de que la cuenta atrás del 'sanchismo' ya "ha comenzado". 

Además, ha insistido en que hay "dos Españas distintas: la de los alcaldes del PP pidiendo fondos y la España virtual, la que en Moncloa se dedica a la propaganda y a planear el año 2050", ha sentenciado García Egea. El secretario general de los populares ha destacado la labor de los populares, que mantendrá "a un salmantino en el Palacio de la Asunción y llevará a un palentino al Palacio de la Moncloa".

Por su parte, Fernández Mañueco ha asegurado que el PP es un partido "útil, porque sumamos mayoría y cumplimos, con proyectos de futuro y con una buena gestión en las administraciones que nos hace creíbles".  El presidente del PP regional ha manifestado que Sánchez sigue "escondido" tras las CCAA y la justicia, con "dejación de funciones", al tiempo que ha indicado que se está aplicando "un 155 a la inversa".  

En cuanto a la pandemia, Mañueco la ha calificado como un "puerto de montaña de primera categoría, en el que tenemos que apretar y no podemos quedaros para atrás". 

Ambos líderes políticos han coincidido en defender el proyecto de Pablo Casado y que el objetivo clave del Partido Popular es "unir al centroderecha para sumar", ya que su división es el "oxígeno del sanchismo", como ha expresado García Egea.