“Este año, a causa del coronavirus y el cumplimiento del confinamiento, estamos viviendo un Ramadán totalmente diferente por el cierre de las mezquitas. Lo celebramos en casa, con nuestras familias y viendo alguna de estas celebraciones por televisión aunque, lógicamente, no es lo mismo”, nos cuenta Bekkai Grioui.

Nacido en Marruecos, pero que suma ya 19 años en España, 15 de ellos en Valladolid, es el presidente de la Asociación Al Mustakbl (El Futuro) y es miembro además de la Federación de Comunidades Musulmanas de Castilla y León (FECOMCYL) y nos habla sobre cómo están llevando los 6.800 musulmanes afincados en la provincia de Valladolid este Ramadán, diferente por el coronavirus.

El mundo musulmán arrancó el pasado jueves 23 de abril un Ramadán que llegará hasta el próximo sábado 23 de mayo. Un mes sagrado de ayuno de sol a sol, oraciones y lectura del Corán en la que es la fase del año más importante para una religión que suma más de 1.900 millones de seguidores a lo largo y ancho de todo el mundo.

Este año, por un motivo excepcional y después de 1.400 años de historia, la Gran Mezquita de La Meca y la Mezquita del Profeta en Medina están cerradas para evitar aglomeraciones en la lucha contra la COVID-19. Ya en la primera noche de este periodo especial del año para los musulmanes solo los clérigos y el personal de limpieza y seguridad pudieron entrar en la mezquita de La Meca y solo por televisión se pudo seguir la ceremonia de anuncio del inicio de este mes sagrado.

“Me gustaría felicitar a todos los musulmanes de todas las partes del mundo en general pero en particular a los 6.800 de Valladolid.  Les pido que cumplan las normas, también durante este mes, en la lucha contra el coronavirus, para volver a la normalidad lo antes posible”, añade Bekkai, en declaraciones a NoticiasCyL Valladolid.

                                      Bekkai Grioui

El miembro de la Federación de Comunidades Musulmanas de Castilla y León (FECOMCYL) nos cuenta que “en Valladolid capital hay cuatro mezquitas y otras dos más en Medina del Campo y Medina de Rioseco”.  Y añade además que “la celebración del Ramadán en pleno confinamiento ha quitado a los musulmanes el rezo en grupos, los encuentros entre familias y amigos y las comidas solidarias para ayudar a la gente más necesitada”. 

“El ayuno dura 17 horas al día, aproximadamente. La oración se repite cinco veces durante cada jornada, añadiendo rezos voluntarios durante el día o la noche sin olvidar la lectura del Corán ya que este es su mes”, nos explica Bekkai, en el que pasa a ser el día a día tipo de la población musulmana durante este mes.

El presidente de la Asociación Al Mustakbl (El Futuro) nos cuenta, para finalizar, que han comenzado con “una campaña de donaciones para apoyar a las autoridades en la lucha contra la COVID-19”. Dice que lo hacen como “gesto de apoyo e integración total en el país” y que “como ciudadanos se encuentran ante el deber de cumplir solidariamente para parar la pandemia”.

“Pido a todos los musulmanes que participen en esta iniciativa. Espero que el Ramadán transcurra de la mejor manera posible y se ponga fin al coronavirus para volver a la normalidad lo antes posible”, finaliza Bekkai. 

Un mes sagrado diferente para la población musulmana por la acción del coronavirus que sigue cobrándose vidas, ayer 325, en nuestro país.