La Junta de Castilla y León y la Xunta de Galicia piden al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana que acepte la construcción “simultánea” y “conjunta” de los viaductos paralelos -sentido Madrid y La Coruña- de O Castro en la Autovía del Noroeste (A-6), a su paso por El Bierzo (León). En una carta conjunta, los departamentos de Movilidad de las dos comunidades le piden que “reconsidere” su decisión y acometa esta actuación por el procedimiento de emergencia.

Hay que recordar que en junio de 2022 se produjo el derrumbamiento del viaducto de Castro en la A-6 entre Galicia y León y, pocos días después, se vinieron abajo los vanos que servían de carril en el viaducto sentido Coruña. Afortunadamente, en los derrumbes no se produjeron víctimas. El viaducto se encontraba cerrado al tráfico desde el verano de 2021, después de que se detectasen unos problemas que estaban siendo reparados a través de una actuación dotada de 26 millones de euros de presupuesto y que estaban, supuestamente, a punto de finalizar. 

La misiva, a la que tuvo acceso Ical, indica que la "reconstrucción total" de la A-6 mediante la ejecución “simultánea” de ambos viaductos es una demanda de los dos gobiernos autonómicos, así como de sus sectores sociales, económicos y empresariales, según recoge el texto que firman las consejeras María González Corral y Ethel Vázquez. Cuando se va cumplir un año desde ese “grave” hecho, denunciaron que los ciudadanos no tienen una alternativa “segura y viable” y tendrán que “esperar mucho tiempo”.

En ese sentido, Castilla y León y Galicia señalan que tienen la “obligación” de advertir de que esta situación perjudica gravemente a la seguridad vial puesto que recordaron que en los últimos meses se han producido al menos cuatro accidentes de tráfico en el desvío habilitado por el Ministerio. También, consideraron que afecta a la competitividad y a la logística del transporte en general y, en particular, a cada uno de los usuarios de la autovía.

“Consideramos necesario transmitirte, una vez más, que no podemos ni compartir ni comprender el posicionamiento negativo de ese Ministerio para la ejecución conjunta y simultánea de ambos viaductos para la reconstrucción total de una autovía de carácter estratégico y que no cuenta con vía alternativa adecuada y segura”, recoge la carta.

Al respecto, las dos autonomías explican que la ejecución “conjunta y simultánea de viaductos paralelos” es el procedimiento habitual en las obras “lineales” porque argumentaron se acortan plazos, se aprovechan sinergias, se reducen riesgos y en consecuencia, se ahorran costes.

Por último, advirtieron de que la fórmula del Ministerio podría conllevar “consecuencias futuras graves y negativas” porque recordaron se pasará de una vía de cinco carriles a una “provisional” de dos, “con un tráfico alto y gran número de vehículos pesados”, por lo que se convertirá en un “cuello de botella”. Además recordaron que se está ejecutando en una ladera con pendiente pronunciada por lo que los riesgos geotécnicos de una ejecución diferida del segundo viaducto pueden, a su juicio, resultar “mayores”.