Unas 72.000 familias del mundo rural de Castilla y León pueden estar contentos. Tendrán por fin acceso a internet de alta velocidad y cabe destacar que se trata de vecinos que hasta el momento tienen una conexión de bajo rendimiento o incluso carecen de cualquier señal. Así lo ha anunciado el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, que ha publicado el resultado provisional de la segunda convocatoria del Programa ÚNICO-Banda Ancha, que será financiado a través de los Fondos Next Generation EU y están dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia.

Adamo será el operador encargado de extender la fibra óptica por estas áreas rurales. El Ministerio ha dotado a la empresa de 19 millones de euros, más 11 de capital privado, para contar con un presupuesto de 30 millones para llevar a cabo el acometido. El plazo que manejan para que la instalación este terminada es para antes del 31 de diciembre de 2024.

Por provincias la distribución es la siguiente: Salamanca 20.500 hogares, con un presupuesto de 8,4 millones, Ávila 16.700 hogares con un presupuesto de 8,3 millones, Zamora 15.700 hogares con un presupuesto de 6,1 millones, León 14.600 horas con un presupuesto de 5,4 millones y Valladolid 4.300 hogares con un presupuesto de 1,82 millones de euros.

 Y es que la fibra óptica juega un papel clave en una lucha como es la despoblación. Un internet de garantía y de calidad ayudarán a que opciones tan cotidianas como el teletrabajo, compras, citas médicas telemáticas o la educación se conviertan en una realidad en estas poblaciones.